El grupo de medicamentos peligrosos, abierto a los veterinarios

Este viernes 16 de mayo, José Luis Cobos, vicesecretario del Consejo General de Enfermería y el sindicato de enfermeros SATSE se han reunido con el director del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), Francisco Javier Pinilla, para que la institución haga llegar al Ministerio de Trabajo la necesidad de crear un nuevo Real Decreto sobre medicamentos peligrosos.

Tanto el Consejo General de Enfermería como SATSE forman parte de un grupo de profesionales que se creó hace tres años y que cuenta con una veintena de organizaciones del sector de la sanidad, que incluye también a sindicatos y asociaciones de pacientes, pero que no cuenta con ninguna institución veterinaria.

Sin embargo, Cobos ha adelantado en declaraciones exclusivas para Animal’s Health que la exposición de los veterinarios a los medicamentos peligrosos ha sido uno de los temas tratados —introducido por su parte— durante la reunión, y ha adelantado que el grupo de trabajo está abierto a que los veterinarios participen.

La intención del vicesecretario es contactar personalmente con representantes del sector veterinario para que se sumen y participen en las reuniones periódicas que el grupo profesional realiza para promover la redacción de una nueva ley de medicamentos peligrosos, que quieren que aplique a todos los colectivos expuestos a fármacos peligrosos.

Esta reunión se ha conseguido tras varios contactos con el Ministerio de Trabajo, aunque finalmente la reunión ha sido con el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, que no tiene potestad para legislar y solo cuenta con funciones de carácter técnico. A pesar de esto, el vicesecretario del Consejo de Enfermería considera este encuentro “un paso”.

De hecho, apunta que han conseguido una serie de compromisos por parte del Instituto, como la redacción conjunta de guías y una participación más activa del INSHT a la hora de realizar campañas de sensibilización y divulgación para los profesionales sanitarios sobre los medicamentos peligrosos, lo que incluiría acciones como cartelería u organización de jornadas.

Actualmente, en nuestro país solo existe una ley que contemple el manejo de medicamentos peligrosos, la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, aunque desde el grupo de trabajo consideran que es demasiado general y necesitan una más específica, aunque apuntan que, de momento, el Ministerio de Trabajo “no es muy partidario”. Otro de los compromisos conseguidos en la reunión es que el INSHT le transmita a Trabajo la necesidad de una nueva normativa.

También existe un Real Decreto que transpone una directiva europea sobre el manejo de sustancias cancerígenas y el PSOE presentó el pasado 21 de febrero una Proposición no de ley (PNL), que redactó junto a UGT y SATSE, para instaurar una norma estatal y obligatoria que proteja a los profesionales sanitarios, aunque este proyecto, impulsado principalmente por el sector de la enfermería, actualmente no contempla a los veterinarios.

Ahora, este grupo quiere una normativa más actualizada, como ya está preparando Europa, que contemple otros nuevos medicamentos como los citostáticos y neoplásicos que hasta ahora no se estaban contemplando, y que además contemple el transporte, preparación, administración y deshecho. “Porque el contacto no lo tienen solo los profesionales sanitarios, sino también el personal de limpieza o incluso los propios pacientes y sus familias”, apunta.

Si no fructifica la opción de sumarse al grupo de trabajo de medicamentos peligrosos, la última opción que les queda a los profesionales de la salud animal para protegerse de los medicamentos peligrosos es que el Convenio Colectivo Nacional Veterinario,que se está redactando con la participación de la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE) y los sindicatos UGT, CCOO y CIG, contemple los medicamentos peligrosos como riesgo laboral.

Por otro lado, CEVE ha recibido una subvención de 25.454 euros por parte de la Fundación Estatal para la Prevención de los Riesgos Laborales para que elaboren, publiquen y distribuyan 3.000 ejemplares de un manual de riesgos laborales para los veterinarios clínicos.