Los caballos usan menos energía en el galope de lo que se pensaba

Investigadores del Royal Veterinary College (RVC) de la Universidad de Londres han utilizado la tecnología de las placas de fuerza para medir con precisión el trabajo externo –cuánto trabajo tienen que realizar los équidos para moverse en relación con su entorno– del galope de los caballos de carreras. La utilización de esta técnica, que no había sido usada antes en animales de estas proporciones a altas velocidades, ha desvelado que los niveles de energía utilizados son mucho menores que lo que habían concluido los estudios realizados con otros métodos.

El estudio se ha llevado a cabo en la superficie de carreras de la British Racing School, y para llevarlo a cabo los investigadores han colocado una pista con placas de fuerza sobre la que un jinete profesional ha realizado pasadas a lomos de siete caballos pura sangre inglés, lo que ha permitido a los académicos de la RVC medir directamente el trabajo mecánico externo del galope.

“Fue un dato realmente difícil de recopilar y, por lo que sabemos, es la primera vez que se recopilan datos de la placa de fuerza en galopes de alta velocidad en un animal tan grande”, ha explicado Zoe Self Davis, investigadora postdoctoral de la RVC.

El nuevo trabajo de investigación ha concluido con unos valores más bajos que los registrados previamente en otros estudios. Y es que los científicos del RVC explican que estas investigaciones utilizaban otras técnicas y los valores de "trabajo externo", como así lo llaman, tan altos que obtenían no encajaban con el hecho de que los caballos han evolucionado para moverse a altas velocidades en largas distancias. Por ello, consideran que los nuevos valores recogidos son más acordes con esta idea evolutiva.

Además, los investigadores han calculado la eficiencia muscular de los caballos al galope. Este valor es el resultado de la combinación de los nuevos valores de trabajo externo y los valores publicados del trabajo metabólico —la conversión de los alimentos en energía utilizada por los músculos— y el trabajo mecánico externo —cuanto trabajo es necesario para mover las extremidades en relación con el cuerpo—. El estudio ha fijado que los valores de eficiencia de los caballos investigados están entre el 37 y el 46%.

Un estudio que arroja luz sobre los équidos y como pueden galopar tan eficientemente durante largas distancias. “Este dato proporciona nuevos conocimientos sobre estos notables animales”, ha concluido Alan Wilson, uno de los autores de la investigación especialista en biomécanica del aparato locomotor.