Extraen a una vaca de concurso un alambre alojado cerca de su corazón

Una vaca lechera de raza jersey, de 2 años de edad, llamada Tag 1839, fue llevada al hospital veterinario de la Universidad de California en Davis (UCD), en Estados Unidos, por una presunta neumonía. Aunque el veterinario de la explotación ganadera había tratado de manera adecuada al animal, la vaca no experimentaba una mejoría significativa, por lo que fue derivada al Servicio de Medicina y Cirugía de Ganado de la Universidad para obtener más información al respecto.

Mediante un análisis de sangre, los veterinarios descubrieron indicios de una inflamación crónica severa, y una posterior ecografía demostró que la vaca presentaba líquido, inflamación y un absceso en su cavidad torácica. Pero fueron las radiografías las que mostraron por fin la causa del malestar del animal y es que tenía un cuerpo extraño, en concreto un trozo de alambre alojado que se extendía desde el primer compartimento de su estómago hasta su corazón.

Según indican los veterinarios de la UCD, no es extraño el hecho de encontrar alambre u otros objetos metálicos en las vacas lecheras, que los ingieren mientras se alimentan. Y es que el alambre puede caer en su comida desde los mismos equipos utilizados para mezclar y cortar el alimento, o desde el metal que es utilizado para atar las pacas de heno.

Cuando una vaca ingiere un alambre, éste puede avanzar mientras su estómago se contrae, lo que puede causar una perforación de la pared del estómago o de la cavidad torácica, y en determinados casos puede, de esta manera, llegar hasta el corazón.

Si un alambre consigue penetrar en la cavidad torácica de la vaca puede resultar fatal para esta ya que, generalmente, sucumben ante una infección o una insuficiencia cardíaca en los casos en los que el metal consigue perforar el corazón o su cubierta.

Además, la extracción quirúrgica del cable es la única opción para solucionar realmente el problema, sin embargo, una cirugía de tórax conlleva un coste elevado y unos riesgos significativos.

A este respecto, Meera Heller, jefa del Servicio de Medicina y Cirugía de Ganado de la UCD, informó al propietario de la vaca de los riesgos de la intervención. En este sentido, dado que se trataba de una famosa vaca de concurso, además de ser genéticamente valiosa, se decidió intervenirla quirúrgicamente.

A la hora de explicarle al dueño el pronóstico grave y los riesgos de la cirugía, el propietario mantuvo una actitud “notablemente optimista”, indica Heller, quien agradece “el optimismo y la confianza en el equipo que ayudó a seguir adelante con la cirugía”.

La cirugía que se llevó a cabo se denomina como resección de la quinta costilla, durante la cual se extrae la mitad de la quinta costilla para permitir el acceso a la cavidad torácica. Según informa el equipo de profesionales la operación se llevó a cabo de pie, permitiendo así un mejor acceso y una posición natural de los tejidos, mientras el animal estaba sedado.

Finalmente, la cirugía concluyó de manera exitosa para la vaca que, tras recuperarse de la operación, se convirtió en ganadora del primer premio ‘Supreme Grand Champion dairy cow’ de la feria de animales de exhibición del Estado de California.