La experta Xiomara Lucas aborda en el podcast 'Virbac Contigo' la relación de la castración quirúrgica con algunos tumores vinculados con el sistema inmune y el sistema hematopoyético
¿Existe una relación entre la castración quirúrgica y el riesgo de padecer tumores en mascotas?
La experta Xiomara Lucas aborda en el podcast 'Virbac Contigo' la relación de la castración quirúrgica con algunos tumores vinculados con el sistema inmune y el sistema hematopoyético
Francisco Ramón López - 25-01-2024 - 09:15 H - min.
El podcast ‘Virbac Contigo’, centrado en la formación de los veterinarios, sigue adelante proporcionando información a los veterinarios de distintos ámbitos de la salud animal, como la reproducción, los problemas de conducta o la rehabilitación.
De esta manera, Xiomara Lucas, diplomada europea en reproducción de pequeños animales y profesora titular del Departamento de Medicina y Cirugía Animal de la Universidad de Murcia, vuelve al podcast para seguir hablando de castración, en este caso su relación con ciertos tumores.
Esta es la última entrega de una serie de tres centrada en la castración, en el que la experta analiza las razones por las que la castración quirúrgica aumenta el riesgo de padecer algunos tumores y el papel de la lormona luteinizante (LH), y las diferencias con la esterilización médica.
En este sentido, la experta recuerda que, aunque la castración tiene efectos beneficiosos para reducir algunos tumores del sistema reproductor, tanto en hembras como en machos, hay otros en los que sucede lo contrario.
“Lo que hemos estado descubriendo estos últimos años es que existe un efecto negativo sobre la aparición de otros tipos de tumores, principalmente aquellos relacionados con el sistema inmune y el sistema hematopoyético, donde se ha observado una vez más una presencia notable de receptores a la LH, que está incrementada significativamente en los animales castrados”, apunta.
Así, explica que la mayoría de las predisposiciones a ciertas patologías que se aumentan con la castración se deben a la sobreestimulación de los receptores a la LH en ciertos sistemas o en órganos.
Entre los tumores que menciona Xiomara Lucas están algunos como los carcinomas de células transicionales de vejiga, osteosarcomas, hemangiosarcomas cardíacos, linfomas y mastocitomas.
Eso sí, recuerda que estos riesgos no se han demostrado en el caso de los gatos y, en el caso de los perros, varían con las razas, el sexo e incluso el tamaño del animal. “Existen muchísimos artículos publicados al respecto, con resultados que van a ser muy variables dependiendo de las razas en estudio”, indica.
“Por tanto, dado el carácter hereditario de estos tumores y de la predisposición de ciertas razas, quizás sea en ellas, una vez más, donde tendremos que considerar individualmente el efecto beneficioso o no de la castración”, explica.
Otro factor es la edad de la castración. Es decir, cuanto más joven sea el animal, mayor riesgo de padecer este tipo de tumores en edad adulta. Y también, añade, “hay una clarísima influencia nuevamente del sexo, siendo de nuevo las hembras las que tienen mayor riesgo post castración”.
La castración también puede tener otros efectos negativos en los perros como problemas en el sistema locomotor o de comportamiento, aunque recuerda que aquí también influye mucho el tamaño y la edad a la que se realiza la castración. “Ante dudas de saber si la castración va a ser beneficiosa o no, puedes proceder a una esterilización médica temporal, por ejemplo, con la deslorelina”, señala.
Como conclusión, la experta señala que los profesionales tienen que tener en cuenta que la castración quirúrgica no es un proceso totalmente inocuo para la salud como se había pensado en el pasado.
Por lo tanto, insta a hacer “un cambio de visión” y a la hora de tomar la decisión tener en cuenta varios aspectos, como el motivo real por el cual se quiere hacer la castración y la especie y la raza del animal que se va a castrar.
“En la actualidad ya se han descrito interesantísimos artículos donde se establecen los rangos de edad de castración seguros para cada sexo en muchas de las razas más conocidas que tenemos en nuestra clínica diaria y para evitar el aumento de incidencia de estas patologías que hemos ido viendo”, añade.
Teniendo en cuenta todo el conocimiento actual, hay que decidir de forma individualizada cuál va a ser el mejor momento para realizar la castración y, por supuesto, si en vez de la castración quirúrgica definitiva, se pueden plantear otras alternativas temporales que pueden resultar mucho más beneficiosas, como la deslorelina, ya que no produce el incremento de la LH, relacionado con algunos tumores.