El papel del propietario en la lucha contra las especies invasoras

La ciudadanía juega un papel muy importante en la lucha contra las especies exóticas invasoras, pues una acción o una actitud, como cambiar el agua los platos de las macetas, puede evitar la proliferación, por ejemplo, del mosquito tigre. En este sentido, al ser propietario de animales de compañía la responsabilidad se acrecienta, y no solo por la tenencia de animales exóticos, sino porque gestos como cambiar diariamente el agua de los bebederos de las mascotas también puede evitar la proliferación de estos insectos, que son importantes vectores de enfermedades zoonóticas.

Descartar la presencia del jacinto de agua (camalote) en pequeños estanques domésticos o peceras o no comprar tortugas de Florida, entre otras especies exóticas, son algunas de las decisiones o acciones que el propietario debe adoptar. Unos actos a los que se suman los comunes de los ciudadanos, que pueden ser tan variopintos o poco conocido como evitar recipientes con agua para las flores en los cementerios, entre otros.

Si dicho papel de colaboración y concienciación es importante, lo es también el de los medios de comunicación a la hora de trasladar a la sociedad las amenazas que suponen este tipo de especies exóticas invasoras que, a juicio de la jefa del Área de Vida Silvestre de la Dirección General de Medioambiente de Extremadura y coordinadora de proyectos contra estas especies, María Jesús Palacio, "han llegado para intentar quedarse".

"Son un problema de salud, son un problema para la agricultura y la ganadería y para la biodiversidad" autóctona, agrega Palacio en una entrevista con Efe tras la reunión celebrada por los llamados "Agentes Clave" del proyecto Interreg Europe Invalis, dirigido a proteger la biodiversidad europea de especies exóticas invasoras.

Administración, agricultores, ganaderos, cazadores, entidades ecologistas, técnicos medioambientales, investigadores y efectivos de los Cuerpos de Seguridad, entre otros sectores, han celebrado una reunión en Mérida (España) para mejorar la legislación en materia de especies invasoras y favorecer la coordinación entre los diferentes sectores involucrados en esta gestión.

Las especies exóticas invasoras (EEI) representan una amenaza para la biodiversidad y los ecosistemas naturales, pueden causar una reducción o extinción de poblaciones de especies nativas, plantean preocupaciones para la salud humana y animal y causan daños por valor de miles de millones de euros a la economía de la UE cada año.

"La sociedad no es consciente de cuánto dinero público se destina para luchar contra estas especies... y que se resta de otras partidas también públicas", advierte Palacios.

Por ello, la colaboración ciudadana, con pequeños gestos, y los medios de comunicación, con la difusión de noticias en esta materia, son "tan importantes". 

"Sin los medios de comunicación, los técnicos que trabajamos en este tema perdemos un porcentaje muy válido de ser también interlocutores para la sociedad", añade.

La Unión Europa tiene reconocidas unas 12.000 especies exóticas, de las que el 15% son invasoras, y el presupuesto para su gestión roza los 12.500 millones de euros al año.

En la península ibérica, uno de los puntos calientes de bioinvasión a escala global, los ecosistemas acuáticos albergan cerca de 200 especies exóticas invasoras (EEI), entre fauna y flora, y cada año este número aumenta a razón de dos o tres especies nuevas.