Denuncian al Ayuntamiento de Puigcerdà por omisión en el rescate de un perro que murió atropellado en las vías del tren

El pasado día 30 de marzo, un perro fue atropellado en las vías del tren en el municipio de Puigcerdà (Girona). Una persona dio aviso del atropello a las 12h a la Policía Local informando sobre el accidente.

El animal permaneció en las vías del tren sin poder moverse del lugar por las graves heridas y lesiones que presentaba. Transcurrieron 3 horas hasta la llegada del siguiente tren.

Tres horas en las que, según la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA), nadie actuó para rescatar a ese animal y proporcionarle atención veterinaria. "Ninguna autoridad competente, ni servicio de recogida, ni personal del ayuntamiento, ni servicio veterinario. Tres horas sufriendo hasta que llegó otro tren que entonces sí, acabo con su vida", denuncian.

Cuando los voluntarios de la entidad local tuvieron conocimiento de lo sucedido se desplazaron rápidamente al lugar, pero el animal ya estaba muerto.

Tras consultar sobre el ocurrido al ayuntamiento desde la fundación, desde el mismo reconocen no disponer de ningún protocolo de actuación en caso de localizar animales heridos o enfermos.

FAADA considera gravísima la inacción, descoordinación y falta de protocolos para actuar con la urgencia que se requería por parte de la administración local.

“La responsabilidad de la muerte del animal recae directamente en el ayuntamiento. La Ley, de hecho, obliga a las entidades locales (ayuntamientos) la gestión de los animales perdidos y abandonados debiendo disponer de un servicio de urgencia para la recogida y atención veterinaria disponible las veinticuatro horas del día”, señalan.

Por todo ello, desde FAADA se ha procedido a interponer denuncia contra el Ayuntamiento de Puigcerdà, para que hechos como los sucedidos no se vuelvan a repetir nunca. De momento, en la vía administrativa, la Generalitat de Cataluña ha incoado expediente sancionador por la presunta comisión de infracciones administrativas de la Ley de protección animal.

Tal y como indica Anna Estarán, abogada de la fundación de protección animal: “Confiamos que este terrible caso sirva, como mínimo, para que las administraciones asuman cuáles son sus obligaciones y destinen los recursos económicos y humanos necesarios para cumplir con sus competencias. Asimismo, que destinen el tiempo e interés en desarrollar los procedimientos y protocolos necesarios para intervenir diligentemente en situaciones donde un animal abandonado, perdido o desamparado requiera ser socorrido.”