El hombre no cumplió con el protocolo de retirada del cadáver del medio natural, provocando que los buitres comieran la carne del toro muerto y se intoxicaran con el medicamento de la eutanasia
Denunciado un ganadero por la muerte de buitres intoxicados tras alimentarse de un toro eutanasiado cuyo cadáver no retiró
El hombre no cumplió con el protocolo de retirada del cadáver del medio natural, provocando que los buitres comieran la carne del toro muerto y se intoxicaran con el medicamento de la eutanasia
Redacción - 14-06-2024 - 12:00 H - min.
Agentes de la Policía de la Generalitat - Mossos d'Esquadra de la Unidad Regional de Medio Ambiente (URMA) de la Región Policial del Alto Pirineo y Arán (RPPA) denunciaron a un hombre como presunto autor de un delito contra la fauna protegida y maltrato animal.
La investigación se inició el pasado 12 de octubre del 2023 cuando un ciudadano, que estaba haciendo senderismo en el término municipal de Naut d'Aran, llamó al 112 alertando de que se había encontrado unos animales muertos.
Ante estos hechos, se activó a los Agentes de Medio Ambiente del Conselh Generau d'Aran, que se dirigieron a la zona indicada, donde localizaron muertos dos buitres comunes (Gyps Fulvus), cercanos a los restos de un toro de raza parda, en una zona de pastos del Pla de Beret (Naut d'Aran)
A continuación, se activó el protocolo establecido cuando se encuentran animales protegidos fallecidos en extrañas circunstancias, y se trasladaron a los animales al servicio de ecopatología de fauna salvaje del departamento de medicina y cirugía animal de la Universidad Autónoma de Barcelona.
La analítica efectuada en los buitres determinó que la muerte de éstos fue provocada por la ingesta de pentobarbital, un medicamento utilizado para realizar la eutanasia a animales que tienen enfermedades graves para evitar su sufrimiento.
Este diagnóstico fue enviado al Servicio de Medio Ambiente del Conselh Generau d'Aran que traspasó toda la información a los agentes de la Unidad de Medio Ambiente de los Mossos d'Esquadra de la Región Policial del Alt Pirineu y Aran para que averiguara las circunstancias de la muerte de los dos buitres.
Las gestiones de los investigadores permitieron constatar que el propietario del toro de raza parda, al que le practicaron la eutanasia, no cumplió con el protocolo de retirada del cadáver del medio natural, incumpliendo la normativa vigente en referencia a la recogida y gestión de cadáveres de las explotaciones ganaderas que marca el Decreto 40/2014, de 25 de marzo.
Este incumplimiento en la retirada del animal provocó que los buitres comieran la carne del toro muerto y se intoxicaran con el medicamento que le inyectaron para hacerle la eutanasia.
Ante estos hechos, se procedió a denunciar al propietario del animal, un varón de 41 años, por un delito de imprudencia grave contra la fauna y por maltrato animal de una especie protegida.