La sobrealimentación puede afectar a los pies de los caballos

Numerosos profesionales coinciden en la sensibilidad que tienen los dedos de los caballos dada la presión que soportan por su propio peso y la carga añadida que supone el hecho de montarse sobre él y hacer que realice diferentes ejercicios. Es por ello que los expertos advierten de que una dieta excesiva de carbohidratos, entre otros ingredientes, condiciona la movilidad del animal.

Los profesionales de la Clínica Veterinaria Equina Equinuvi  explican que lo que se conoce como “laminitis”, o “infosura” si es una afección crónica, es una dolorosa enfermedad que afecta de forma habitual a los pies de los caballos.

La laminitis, detallan los expertos, “se produce cuando se interrumpe, ya sea de manera constante, intermitente o puntual, el flujo de sangre a la tercera falange que los caballos tienen dentro de los cascos”.  En los casos más graves, apuntan, el hueso y la pared del caso llegan a separarse y de ser así, esta falange gira hasta atravesar la palma del pie del animal.

POSIBLES CAUSAS

Los expertos advierten que determinadas características de los caballos los hace más propensos a sufrir laminitis como las razas pesadas, el exceso de peso y los ponies.

Con todo, los profesionales señalan que, aunque la laminitis se produce en los pies, la causa suele provenir de otra parte del cuerpo del caballo como los trastornos digestivos debido a una sobrecarga de grano, fruta, pan o carbohidratos en la dieta, el exceso de forraje y cambios bruscos en el régimen alimenticio.

Por otro lado, los expertos también indican como factores condicionantes aquellas enfermedades que provocan fiebre ya que predisponen al animal a sufrir laminitis, los cólicos o la enfermedad de Cushing.

Finalmente, los profesionales valoran el daño que puede causar el golpeteo excesivo de los pies, también llamado “infosura de camino”, el exceso de carga de peso sobre los pies debido a una lesión o incluso el uso prolongado o la administración de altas dosis de corticosteroides.

SÍNTOMATOLOGÍA

Entre los signos más habituales de un caballo que padece laminitis se encuentran la cojera, que se detecta cuando el caballo se muestra reticente a moverse, cambia el peso que ejerce sobre las patas mientras está parado o adopta la postura del caballete que se basa en estirar las patas delanteras para aliviar la presión, además del dolor que experimenta en la región de la palma del pie.

TRATAMIENTO

Dependiendo del caso, se procederá a aplicar un tratamiento u otro. En primer lugar, los veterinarios deben restringir la dieta del animal, eliminando los piensos y forrajes hechos a base de granos y sustituirlos por heno, junto con la administración de anticoagulantes y vasodilatadores que disminuyen la presión arterial a la vez que mejoran el flujo de la sangre de los pies.

De producirse abscesos, es recomendable abrirlos y drenarlos.

Y por último, los expertos mencionan la necesaria cooperación entre el veterinario y el herrador para utilizar técnicas que alivien o prevengan la laminitis como el recorte correctivo y el uso de herrajes terapéuticos.

Esta información es meramente orientativa. En Animal’s Health, le recordamos que, ante cualquier duda, lo mejor es que lleve a su mascota al veterinario.