La Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica ha publicado su último informe de enfermedades transmisibles en humanos en España, que recoge numerosas zoonosis de interés para el sector de la salud animal
Las zoonosis y enfermedades vectoriales con más incidencia en España
La Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica ha publicado su último informe de enfermedades transmisibles en humanos en España, que recoge numerosas zoonosis de interés para el sector de la salud animal
Jorge Jiménez - 26-12-2023 - 12:27 H - min.
La Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha publicado los resultados de la vigilancia de las enfermedades transmisibles en España en 2022, en los que se recoge la incidencia de numerosas patologías, incluidas algunas zoonósicas.
El informe está dividido en distintas categorías: enfermedades transmitidas por alimentos y agua, prevenibles por vacunación, de transmisión respiratoria, transmitidas por vectores, zoonosis, de transmisión sexual y parenteral, y encefalopatías espongiformes de transmisión humana.
En el caso particular de las enfermedades transmitidas por alimentos, en 2022 destacó la campilobacteriosis (20.797 casos), la más común entre todas las categorías y que supera el número de casos del 2021 (17.233). Se trata de una zoonosis cuyos reservorios son principalmente aves de corral y el ganado porcino y vacuno.
También incluyen la salmonelosis (8.777), otra zoonosis transmitida por alimentos, cuyos reservorios animales son especialmente aves de corral, cerdos, ganado y reptiles. En el caso de la salmonelosis, el número de casos se ha incrementado también respecto a 2021, cuando el total fue de 5.244.
Por su parte, la giardiasis (3.243) ha duplicado el número de casos de 2021 (1.584). Se trata de una enfermedad que afecta tanto a humanos como a mascotas y es la tercera enfermedad incluida en el informe.
Por último, en lo relativo a las enfermedades transmitidas por alimentos o agua más frecuentes, recogen la yersiniosis (1.031 casos), que también ha aumentado en número de casos en comparación con 2021 (612), y que según la especie de bacteria puede tener como reservorio al cerdo, ganado ovino, bovino y caprino, aves o mamíferos salvajes y domésticos, en particular roedores y mamíferos pequeños.
Además, en el informe analizan también otras enfermedades transmitidas por alimentos menos comunes, pero de interés para la salud animal, como el botulismo (13), la criptosporidiosis, que pasa de 337 casos en 2021 a 804 en 2022, la listeriosis (459), la triquinosis (1) o la infección por E. coli productor de toxina siga (633).
En líneas generales, en la categoría de enfermedades transmitidas por alimentos, el número de casos se ha incrementado en España en 2022, respecto al 2021.
Por otro lado, el informe recoge la categoría de enfermedades transmitidas por vectores, en la que se encuentran enfermedades zoonósicas muy relevantes como la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo.
En este caso, hay que recordar que el reservorio principal de esta enfermedad son garrapatas Ixodidae del género Hyalomma. Pequeños vertebrados (liebres, erizos, roedores) actúan como huéspedes amplificadores, mientras que grandes mamíferos domésticos (herbívoros) y salvajes (ciervos, jabalíes) suelen ser huéspedes de las formas adultas.
En España, la primera detección del virus fue en 2010 en garrapatas en Cáceres. Los primeros casos humanos se diagnosticaron en 2016 (1 caso por picadura en Ávila y otro caso secundario por contagio en el medio sanitario a partir del primero); en 2018 hubo otros 2 casos (1 en Badajoz y otro en Salamanca), en 2020 se notificaron 3 casos en Salamanca y en 2021 otros 2 casos (Salamanca y León). En 2022 se han registrado 2 casos.
Sobre la fiebre del Nilo Occidental (4 casos en 2022), el reservorio son aves silvestres o domésticas y se transmite por mosquitos. El número de casos de esta enfermedad ha disminuido respecto a 2021, cuando fueron 6. Algunos mamíferos, como los caballos y humanos pueden ser huéspedes accidentales. Los seres humanos se infectan principalmente a través de picaduras de mosquitos del género Culex.
Respecto a la leishmaniosis (297 casos en 2022) —cifra menor que en 2021 (344)— es una enfermedad de gran interés para el sector veterinario, pues el perro es el reservorio más conocido en España.
También es la enfermedad transmitida por vectores más común en España si se excluyen casos importados. En general, los huéspedes son mamíferos, jugando también un papel los gatos, roedores y otras especies silvestres, como la liebre.
Otra enfermedad de interés veterinario es la fiebre exantemática mediterránea (200 casos), una rickettsiosis humana causada por Rickettsia conorii. Su reservorio y vector son garrapatas de la familia Ixodidae, principalmente Rhipicephalus sanguineus, aunque hay otras especies con capacidad vectorial. El hospedador habitual es el perro, aunque pueden ser otros mamíferos.
Asimismo, el informe incluye otras enfermedades transmitidas por garrapatas presentes en España, como la fiebre recurrente transmitida por garrapatas (15), que aumenta ligeramente en 2022 respecto a 2021 (7).
Además, el informe recoge una categoría centrada en las zoonosis, en la que figuran la brucelosis (24) o el carbunco (2), ambas enfermedades han notificado un descenso en el número de casos respecto a 2021, cuando se notificaron 32 y 6 casos respectivamente.
Por su parte, la fiebre Q, que en 2021 notificó 240 casos, en 2022 asciende hasta los 440; así como la hidatidosis que pasa de 55 a 72; la leptospirosis de 49 a 50; y la toxoplasmosis congénita de 1 a 3. Otras zoonosis como la tularemia se han reducido de 7 casos en 2021 a 6 en 2022.