Un equipo de investigadores ha descubierto la presencia de un nuevo hantavirus en topos ibéricos de Asturias
Virus de Asturias: El nuevo hantavirus descubierto en topos ibéricos
Un equipo de investigadores ha descubierto la presencia de un nuevo hantavirus en topos ibéricos de Asturias
Francisco Ramón López - 19-06-2023 - 11:08 H - min.
La reciente detección de los hantavirus virus Nova (NVAV) y virus Brujas (BRGV) en topos europeos (Talpa europaea) en Bélgica y Alemania ha impulsado la búsqueda de este tipo de virus zoonósicos en el topo ibérico (Talpa occidentalis).
En este sentido, un grupo de investigadores del Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario de Asturias (SERIDA) y la Universidad de Barcelona, junto a instituciones internacionales como el Museo Nacional de Historia Natural de Francia o la Universidad de Keele, entre otros, ha analizado el tejido pulmonar de 106 topos ibéricos para buscar la presencia de este tipo de virus.
Se trataba de tejido preservado recolectado entre enero de 2011 y junio de 2014 en Asturias, y todos se analizaron para detectar ARN de hantavirus mediante PCR. La comparación de secuencias genéticas detectadas en 11 topos ibéricos de cuatro regiones indicó la circulación de hantavirus genéticamente distintos en estos animales.
Concretamente, los análisis filogenéticos, utilizando métodos bayesianos y de máxima verosimilitud, demostraron la presencia de tres hantavirus distintos en topos ibéricos: NVAV, BRGV y un nuevo hantavirus, denominado virus Asturias (ASTV). En total, se identificaron BRGV, NVAV y ASTV en seis, cuatro y un topo ibérico, respectivamente.
El nuevo hantavirus, que recibió el nombre de ASTV 3877 por el lugar donde se atrapó el topo ibérico, mostró una similitud de secuencia baja con dos hantavirus transmitidos por topos descritos recientemente: el virus de Academ (ACDV) y el virus Landiras (LDRV).
Asimismo, los análisis filogenéticos basados en el segmento S de longitud completa y las secuencias parciales de los segmentos M y L, usando métodos bayesianos y de máxima verosimilitud, indicaron que ASTV 3877 representaba un hantavirus distinto.
Con el reciente descubrimiento del ACDV y el LDRV en el topo siberiano y el topo de Aquitania, respectivamente, el número de hantavirus transmitidos por topos ahora es nueve: cuatro en Europa (ASTV, BRGV, LDRV y NVAV), tres en Asia (ACDV, ASAV y DHCV) y dos en América del Norte (OXBV y RKPV).
(A) Topo ibérico y topo europeo adultos, mostrando el tamaño comparativamente más pequeño de la primera especie. (B) Mapa que muestra sitios en Asturias, en el noroeste de España, donde se recolectaron topos ibéricos infectados con hantavirus
Los investigadores explican que el topo europeo, que alberga NVAV y BRGV, tiene un rango geográfico excepcionalmente amplio en Europa y el oeste de Asia, que se extiende hacia el norte hasta el Reino Unido y el sur de Escandinavia (Suecia y Finlandia), hacia el sur hasta el norte de Grecia y hacia el este hasta Polonia, Ucrania y el oeste de Siberia.
Por el contrario, indican que el topo ibérico tiene una distribución geográfica muy limitada, y se circunscribe únicamente a España y Portugal. “Aunque el topo europeo es la única especie de topo en la mayor parte de su área de distribución, existe una superposición geográfica con el topo de Aquitania”, apuntan.
“Curiosamente, NVAV y BRGV se encontraron con más frecuencia que ASTV entre los topos ibéricos en este estudio. Solo 1 de los 11 topos ibéricos infectados por hantavirus tenía ASTV. Sin embargo, una limitación de nuestro estudio fue no incluir topos europeos capturados al oeste de Asturias y/o en otras partes del norte de España”, admiten.
Como conclusión de su estudio, defienden que la opinión de que cada especie de hantavirus es albergada por una sola especie huésped de mamíferos pequeños “ahora parece demasiado simplista e inválida”. “Los eventos de intercambio de huésped, cambio de huésped y derrame han ocurrido con frecuencia en la historia evolutiva de los hantavirus, de modo que ciertas especies de hantavirus son transportadas por múltiples huéspedes mamíferos pequeños simpátricos y, a la inversa, ciertas especies reservorios pueden albergar más de una especie de hantavirus”, insisten.
Así, defienden que, al igual que el topo europeo, que alberga NVAV y BRGV, los topos ibéricos parecen albergar más de una especie de hantavirus. Eso sí, matizan que la identificación definitiva de hantavirus en el topo ibérico debe esperar al análisis de la secuencia del genoma completo y al aislamiento del virus.
“En general, este estudio apoya la creciente comprensión del hantavirus y la ecología del huésped como una historia evolutivamente compleja que merece una investigación continua sobre los patrones y mecanismos involucrados”, concluyen.