Con motivo del Día Nacional de la Prevención de la Leishmaniosis Canina el Colegio de Veterinarios de Sevilla ha dado a conocer un poco más esta zoonosis y su impacto en la salud pública
Los veterinarios de Sevilla recuerdan la importancia de la concienciación por el Día Nacional de la Prevención de la Leishmaniosis Canina
Con motivo del Día Nacional de la Prevención de la Leishmaniosis Canina el Colegio de Veterinarios de Sevilla ha dado a conocer un poco más esta zoonosis y su impacto en la salud pública
Redacción - 28-05-2024 - 09:21 H - min.
El próximo 1 de junio se celebra el Día Nacional de la Prevención de la Leishmaniosis Canina, y desde el Colegio de Veterinarios de Sevilla han querido dar a conocer un poco más esta enfermedad y la forma en la que puede afectarle las mascotas, a sus titulares y a todos los que las rodean. Para ello han publicado una serie de infografías.
En este sentido, recientemente, los veterinarios de Andalucía han estado formándose frente a la leishmaniosis. De hecho, el Consejo Andaluz de Colegios Veterinarios ofreció este martes 23 de abril un curso formativo impartido por Leire Queiruga, Medical Scientific Liaison de LETI Pharma, que contó con más de 500 veterinarios inscritos.
“La leishmaniosis es una importante zoonosis, que fue incluida en 1982 como enfermedad de declaración obligatoria en España”, recuerdan desde el Colegio de Veterinarios de Sevilla.
Además, señalan que la leishmaniosis es una enfermedad parasitaria cuyo agente causante es un parásito microscópico que se transmite a través de la picadura de un insecto similar a un mosquito infectado, llamado flebótomo.
La cuenca mediterránea es endémica, no solo para la leishmaniosis canina, sino también para la humana. Aunque el perro no puede contagiar directamente la enfermedad a las personas, sí que es el principal reservorio del parásito, lo que hace de esta enfermedad un riesgo para la salud pública.
Las personas infectadas por Leishmania spp que acaban padeciendo la enfermedad suelen ser niños y adultos inmunocomprometidos. “Es necesario tenerla presente en el cuidado de las mascotas, sobre todo en la época de mayor actividad del vector (de junio a octubre), protegiéndolas mediante repelentes, como collares y pipetas”, apuntan desde el Colegio.
Además, se pueden dar recomendaciones ambientales para reducir el riesgo de contacto, como evitar las zonas de mayor incidencia, lugares de puesta de los huevos (zonas con abundante materia orgánica) y evitar las horas de mayor actividad.