El presidente de la Conferencia de Decanos de Veterinaria de España recuerda que el Grado y la profesión veterinaria va mucho más allá del cuidado de la salud de las mascotas, ya que cuenta con otras múltiples facetas igual de importantes
Veterinaria, “la mejor carrera del mundo”, pero una de las más duras
El presidente de la Conferencia de Decanos de Veterinaria de España recuerda que el Grado y la profesión veterinaria va mucho más allá del cuidado de la salud de las mascotas, ya que cuenta con otras múltiples facetas igual de importantes
Ángel Espínola - 12-06-2018 - 14:00 H - min.
Tras realizar la selectividad, miles de alumnos españoles tendrán que elegir durante los próximos meses, en función de sus preferencias y de la nota obtenida en las pruebas de acceso a la universidad, los estudios universitarios en los que formarse y desarrollar su trayectoria laboral y profesional. Entre ellos, el Grado de Veterinaria se podrá estudiar en hasta 11 ciudades españolas.
En este sentido, el propio presidente de la Conferencia de Decanos de Veterinaria de España y decano de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Pedro Luis Lorenzo, asegura a quienes se plantean dedicarse a esta profesión que la carrera en Veterinaria “es la mejor carrera del mundo, pero una de las más exigentes de España”, según afirma en declaraciones para Animal’s Health.
Concretamente, el Grado en Veterinaria cuenta con 300 créditos ETCS que se estructuran en 5 cursos. De todos estos créditos, 294 son de carácter obligatorio y los 6 restantes de carácter optativo. Además, durante la carrera, los estudiantes también tendrán que realizar prácticas tuteladas (aproximadamente 24 créditos), que se realizarán tanto en laboratorios como en clínicas.
El presidente de los decanos de veterinaria españoles, no obstante, recuerda que aunque la faceta más conocida del veterinario es la del médico de mascotas, tanto en el Grado como en la profesión en sí hay otras muchas facetas que resultan igual de importantes.
“A nivel profesional, de colocación y de salud pública, tan importante como curar animales es conocer la regulación de la sanidad animal o todo lo relativo a la seguridad alimentaria, ya que el veterinario es quien controla todo lo que comen tanto los animales como las personas. Además, durante la carrera se adquieren competencias en medio ambiente, zoonosis, epidemiología o enfermedades transmisibles”, señala Pedro Luis Lorenzo.
Concretamente, los estudios en Veterinaria quedan definidos según el experto en cuatro grandes ramas: la medicina veterinaria, la seguridad alimentaria y tecnología de los alimentos, la producción animal, y la sanidad animal. Y todas ellas, según Lorenzo, son igual de importantes.
Durante el curso 2017/2018, hasta 7.006 estudiantes intentaron acceder al Grado de Veterinaria en una facultad pública. De todos ellos, sin embargo, sólo 1.139 pudieron matricularse finalmente.