Una pareja dona 10 millones a una Facultad de Veterinaria

La Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Estatal de Luisiana, en Estados Unidos, recibe la donación más grande de su historia: 10 millones de dólares otorgados por una pareja, Herman y Connie Soong, a la fundación de la universidad con el objetivo de ayudar con más recursos a los animales heridos y abandonados, además de financiar los estudios de futuros profesionales veterinarios y la investigación en áreas como la oncología, según informa un comunicado de la propia facultad.

La suma de dinero proporcionará recursos al fondo de la universidad para cuidar a los animales heridos y ayudar a aquellos que no tienen hogar.

“Nuestro donativo a la Facultad de Veterinaria responde al deseo de ayudar a los animales inocentes que son maltratados y que no tienen hogar, esperando que nuestra iniciativa también inspire a otros para ser generosos con esta causa”, declara Herman Soong, profesor asistente de psiquiatría y de neuropsiquiatría forense en la Facultad de Medicina de la Universidad de Tulane, en el Estado de Nueva Orleans.

Con todo, esta inversión también posibilitará la creación de una beca para minorías con la que financiar los estudios de futuros profesionales veterinarios y el apoyo a la investigación oncológica.

EDUCACIÓN CONTRA EL MALTRATO ANIMAL

Dado su intereses por la psiquiatría forense, el doctor Soong también se ha comprometido con la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Luisiana para educar tanto a los estudiantes como a los futuros veterinarios en el reconocimiento de signos de maltrato animal, ya que, para Soong, este hecho se correlaciona con la probabilidad que tiene una persona de cometer otros delitos violentos contra las personas.

Por esa razón, el doctor Soong trabajará en estrecha colaboración con el llamado “Programa de Medicina de Refugio” que ofrece la misma Facultad y que está dirigido por Wendy Wolfson, profesora asistente de Medicina y Cirugía de Refugio. Dicho programa se encarga de ayudar a los refugios locales a encontrar adoptantes para los animales abandonados.

“La colaboración del doctor Soong no sólo ayudará a los refugios sino también a las fuerzas del orden público en todo el Estado para que procesen a los acusados de negligencia y crueldad animal”, sostiene la doctora Wolfson.

Idea que también comparte Joel Baines, decano de la misma Facultad, quien considera que “esta inversión transformará nuestra capacidad para abordar las necesidades urgentes en medicina de refugio como evitar el maltrato contra los animales”.