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PROFESIONALES

Estas son las razas de gato con mayor riesgo de cálculos renales

Un nuevo estudio ha determinado qué razas de gato son las que presentan mayor riesgo de desarrollar cálculos renales y ureterales

Radiografía de un paciente con cálculo renal.
Radiografía de un paciente con cálculo renal.

Estas son las razas de gato con mayor riesgo de cálculos renales

Un nuevo estudio ha determinado qué razas de gato son las que presentan mayor riesgo de desarrollar cálculos renales y ureterales

Redacción - 02-03-2023 - 12:06 H - min.

Una nueva investigación desarrollada por el Royal Veterinary College (RVC) ha determinado las razas de gato que presentan un mayor riesgo de desarrollar cálculos renales y ureterales, a saber, las razas birmana, persa, ragdoll y tonkinés.

La investigación es la primera de su tipo en examinar a todos los gatos con urolitos (cálculos) del tracto urinario superior y tiene como objetivo ayudar a los veterinarios con planes de diagnóstico y tratamiento.

La frecuencia de diagnóstico de urolitos del tracto urinario superior en gatos, conocidos como cálculos en el riñón o el uréter, ha ido en aumento en las últimas dos décadas, con un 4,6% de los gatos remitidos al Hospital Queen Mother para animales del RVC durante un período de 10 años.

La última estimación similar en los Estados Unidos fue en 1999, cuando solo el 0,68% de los gatos atendidos en hospitales universitarios veterinarios fueron diagnosticados con urolitos del tracto urinario superior.

Al igual que en los humanos, los urolitos felinos suelen estar compuestos de oxalato de calcio. Esto no se puede disolver naturalmente a través de la dieta o la medicación, y actualmente no existen métodos efectivos para prevenir la formación de estos cálculos en los gatos.

Si estos cálculos se mueven hacia el uréter, pueden causar una obstrucción (bloqueo) que puede poner en peligro la vida y, a menudo, requiere una intervención quirúrgica. Sin embargo, faltan estudios que examinen la frecuencia de los urolitos del tracto urinario superior en gatos en el Reino Unido.

El programa VetCompass del RVC se propuso realizar el primer estudio que examinaba a todos los gatos con urolitos en el tracto urinario superior. El equipo de investigación realizó un estudio observacional transversal de cohortes de todos los gatos atendidos en el Queen Mother Hospital for Animals durante un período de 10 años.

En total, el equipo examinó a 11.431 gatos que habían sido evaluados mediante imágenes abdominales como ultrasonido, rayos X y tomografías computarizadas e identificó 521 gatos con evidencia de urolitos en el tracto urinario superior.

BRITÁNICOS DE PELO CORTO, BIRMANOS, PERSAS, RAGDOLL Y TONKINÉS, LOS GATOS CON MAYOR RIESGO DE CÁLCULOS RENALES

El estudio encontró cinco razas de gatos que tenían un mayor riesgo de diagnóstico de cálculos en el tracto urinario superior en comparación con los gatos que no eran de raza pura. Estos eran británicos de pelo corto, birmanos, persas, ragdoll y tonkinés.

Sin embargo, los gatos que no son de raza (con mayor frecuencia, los domésticos de pelo corto) todavía constituyen numéricamente la mayoría de los felinos que se ven con esta afección.

Este es también el primer estudio que muestra que cuanto más joven es un gato cuando se le diagnostican cálculos renales, mayor es el riesgo de que desarrolle una obstrucción ureteral.

Entre otros resultados del estudio, los investigadores destacan que los factores de riesgo para un diagnóstico de urolitos del tracto urinario superior son ser hembra (frente a macho), ser británico de pelo corto, birmano, persa, ragdoll o tonkinés (frente a gatos que no son de pura raza) y tener más de 4 años de edad. De hecho, apuntan que los gatos de 4 a 8 años de edad tienen el mayor riesgo de ser diagnosticados con urolitos del tracto urinario superior.

Por otro lado, indican que los factores de riesgo para que los gatos con estos urolitos desarrollen obstrucción ureteral (potencialmente mortal) son ser hembras, tener urolitos en ambos riñones y ser más jóvenes.

Los hallazgos del estudio, señalan los investigadores, pueden arrojar luz sobre el mayor riesgo de cálculos en el tracto urinario superior en gatos más jóvenes y destacan que en los pacientes menores de 12 años que presentan azotemia (marcadores renales elevados) los urolitos en el tracto urinario superior deben ser considerados una causa subyacente de su condición.

CUANTO MÁS JOVEN ES UN GATO MÁS PROBABLE ES QUE DESARROLLE UNA OBSTRUCCIÓN URETERAL

El estudio también muestra que cuanto más joven es un gato en el momento del diagnóstico de cálculos renales, más probable es que desarrolle obstrucción ureteral y, por lo tanto, los gatos con un historial conocido de esta afección siempre deben ser examinados para detectar la posibilidad de que la obstrucción ya haya ocurrido.

“Este estudio destaca que los gatos diagnosticados con cálculos renales a una edad temprana tienen un mayor riesgo de obstrucción ureteral que los gatos mayores. Los veterinarios deben ser conscientes de que los gatos que presentan azotemia (sobre todo si son menores de 12 años) podrían tener una obstrucción ureteral y requerir imágenes abdominales para descartarla”, señala Rebecca Geddes, profesora de Medicina Interna de Pequeños Animales en el RVC.

Por su parte, Dan O'Neill, profesor Asociado de Epidemiología de Animales de Compañía en el RVC, apunta que “los profesionales veterinarios trabajan muy duro para mejorar la vida de cada gato que cuidan, pero este estudio muestra que ahora también pueden ayudar a miles de gatos aportando datos clínicos anónimos a proyectos de Big Data como VetCompass”.

LA NUTRICIÓN EN LOS GATOS CON PROBLEMAS RENALES

Como destaca el estudio, su objetivo es ayudar a los veterinarios, contribuyendo a mejorar los planes de diagnóstico y tratamiento en los gatos en todo lo referente a los cálculos renales o ureterales.

La nutrición también juega un papel en este ámbito y, por tanto, los veterinarios deben tenerla en cuenta, no solo cuando tratan a un animal con un cálculo, sino también para mantener a los felinos sensibles a afecciones renales lo mejor alimentados posible.

En este sentido, algunas marcas de nutrición para animales de compañía, como Ownat, de la cooperativa Cotécnica, tienen muy en cuenta la importancia de atender adecuadamente las necesidades específicas de los gatos.

Por ello, dentro de su gama Ownat Care incluyen Ownat Care Renal, un alimento completo y equilibrado para gatos sanos de cualquier raza en fase adulta sensibles a afectaciones del sistema renal.  

Hay que recordar, eso sí, que no es una dieta de prescripción veterinaria, por lo que, desde Cotécnica, recuerdan que si se detecta alguna patología hay que seguir el consejo de un veterinario.

Como se comentaba en la investigación, los veterinarios deben estar alerta ante los cálculos renales en los gatos y conocer a fondo los métodos diagnósticos y tratamiento.

En este ámbito, sin olvidarse del papel que juega la alimentación, Dechra Academy, la plataforma de formación online gratuita de Dechra, incorporó un curso sobre nutrición para actualizar los conocimientos de los veterinarios de pequeños animales en este campo.

Entre el contenido disponible estaba precisamente una formación sobre ‘El papel de la nutrición en el manejo de la enfermedad renal’. Un recurso que puede utilizarse como repaso de la importancia de la nutrición como recurso en el manejo de diversas afecciones, y así poder trasladárselo a los clientes.

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