La Organización Mundial de Sanidad Animal reflexiona sobre los logros de la comunidad veterinaria en todo el mundo al abordar una de las amenazas para la salud mundial más urgentes de nuestro tiempo
La OMSA celebra el avance del sector veterinario en la contención de la resistencia a los antibióticos
La Organización Mundial de Sanidad Animal reflexiona sobre los logros de la comunidad veterinaria en todo el mundo al abordar una de las amenazas para la salud mundial más urgentes de nuestro tiempo
Redacción - 20-11-2024 - 10:29 H - min.
Este miércoles, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) ha lanzado un nuevo informe, 'Hacia un futuro más saludable para todos: Progresos en sanidad animal para contener la resistencia a los antimicrobianos', elaborado con contribuciones de más de 20 miembros y socios clave.
El informe explora cómo el sector de la salud animal ha abordado el desafío de la resistencia a los antimicrobianos (RAM) en los últimos años, destacando los éxitos y avances significativos logrados en todo el mundo, al tiempo que enfatiza la necesidad de acción, inversión y colaboración continuas.
Desde la OMSA indican que los antimicrobianos allanaron el camino para mejorar las condiciones de vida tanto para los humanos como para los animales. Antes del descubrimiento de la penicilina por Alexander Fleming en 1928, las infecciones debido a cortes menores podían provocar infecciones del torrente sanguíneo o la muerte.
“Sin embargo, hoy en día, estos medicamentos que salvan vidas están perdiendo su eficacia debido a su mal uso y uso excesivo en todos los sectores. El fenómeno se conoce como resistencia a los antimicrobianos o RAM, que puede tener su origen en poblaciones animales, humanas o vegetales y suponer una amenaza para todas las especies”, apuntan.
Durante décadas, la OMSA ha trabajado con sus miembros, socios de One Health, veterinarios, el mundo académico, la industria y otras partes interesadas relevantes para generar conciencia sobre esta amenaza para la salud mundial y abordarla.
Han pasado 25 años desde que la Asamblea Mundial de Delegados de la OMSA adoptó una resolución que instaba a desarrollar las primeras directrices sobre la resistencia a los antimicrobianos en el sector de la salud animal. Desde entonces, se han logrado varios hitos importantes que demuestran que las estrategias específicas (en particular, la Estrategia de la WOAH contra la resistencia a los antimicrobianos) pueden producir beneficios sustanciales a pesar de los desafíos que presenta esta compleja cuestión.
El informe presenta ejemplos inspiradores que ponen de relieve los esfuerzos de la comunidad veterinaria en todo el mundo. Por ejemplo, el notable logro de Tailandia al reducir el consumo de antimicrobianos en un 49% entre 2017 y 2019, y en un 39,3% entre 2017 y 2021 es un testimonio del poder de los esfuerzos nacionales concertados. Esas medidas superaron el objetivo inicial y pusieron de relieve los beneficios de una vigilancia rigurosa y la aplicación de políticas.
La Unión Europea (UE) también ha dado pasos importantes. La UE se comprometió a reducir sus ventas generales de antimicrobianos para animales de granja y acuicultura en un 50% antes de 2030, y para 2022 ya se había alcanzado la mitad de ese ambicioso objetivo. Estas medidas proactivas muestran que los cambios impulsados ??por las políticas pueden tener un impacto tangible en la reducción del uso de antimicrobianos y la desaceleración del desarrollo de la resistencia.
La industria acuícola de Noruega ofrece otro ejemplo, que, desde la OMSA, destacan como convincente. Gracias a la vacunación generalizada, Noruega logró reducir el uso de antimicrobianos en el salmón y la trucha arcoíris de 50 toneladas en 1987 a 300 kg en la actualidad, mientras que la producción aumentó un 3300% durante el mismo período. Esto pone de relieve cómo la innovación y la atención preventiva pueden proteger la salud animal y, al mismo tiempo, reducir la dependencia de los antimicrobianos.
El progreso no depende únicamente de políticas y estrategias, sino también de una recopilación y un análisis sólidos de datos. Base de datos de OMSA sobre el uso de antimicrobianos en animales (ANIMUSE) ha sido fundamental para crear un nivel de comprensión sin precedentes sobre el uso de antimicrobianos en todo el mundo.
Durante la última década, el número de países con sistemas de vigilancia del uso de antimicrobianos y/o de la resistencia a los mismos se ha triplicado, y el 80% de los miembros de la OMSA informan datos anualmente.
“Esta infraestructura de vigilancia proporciona la evidencia necesaria para acciones específicas y políticas nacionales más efectivas. Los datos recopilados y analizados a través de ANIMUSE entre 2016 y 2024 muestran un progreso positivo hacia el uso responsable de antimicrobianos en animales, incluida la reducción del uso de antimicrobianos de importancia crítica para los humanos y los esfuerzos para eliminar prácticas inapropiadas como el uso de promotores de crecimiento”, señalan desde la OMSA.
Asimismo, remarcan que, si bien se han documentado avances significativos, los datos recientes sobre los impactos socioeconómicos futuros de la resistencia a los antimicrobianos muestran que es necesario redoblar los esfuerzos colectivos.
Como recuerda la directora general de la OMSA, Emmanuelle Soubeyran, “a pesar de los avances logrados, la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos persiste y requiere más esfuerzos en los próximos años”.
“2024 ha sido un año importante, ya que tanto la Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la resistencia a los antimicrobianos como la cuarta Conferencia Ministerial Mundial de Alto Nivel sobre la Resistencia a los Antimicrobianos sentaron las bases para la acción a través de sus declaraciones políticas. La vigilancia constante, la inversión y la cooperación intersectorial son esenciales para garantizar que los avances logrados no solo se mantengan, sino que se amplíen en nuestro camino hacia un mundo donde los antimicrobianos sigan siendo eficaces”, concluyen desde la OMSA.