Los veterinarios, junto a los farmacéuticos, controlan durante la temporada estival las posibles toxiinfecciones alimentarias, el control de las piscinas y las actividades al aire libre, entre otros aspectos
Los riesgos sanitarios del verano, bajo la vigilancia del veterinario
Los veterinarios, junto a los farmacéuticos, controlan durante la temporada estival las posibles toxiinfecciones alimentarias, el control de las piscinas y las actividades al aire libre, entre otros aspectos
Fernando Núñez Benítez -
26-06-2018 - 14:00 H - min.
Los veterinarios, junto a los farmacéuticos de las diferentes comunidades autónomas realizan durante todo el año actuaciones de vigilancia, control e inspección alimentaria y ambiental para minimizar los riesgos sanitarios y proteger la salud de las personas.
En verano, los profesionales sanitarios intensifican estas actividades debido al aumento de las temperaturas, que conllevan riesgos relacionados con el calor y la manipulación de los alimentos, además de que en este período “se producen muchos más desplazamientos tanto internos como externos”, como indica Agustín Álvarez Nogal, veterinario y director general de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, en declaraciones para Animal's Health.
De este modo, para evitar toxiinfecciones alimentarias, el experto recomienda “la utilización de agua potable a la hora de preparar las comidas, usar materias primas acreditadas sanitariamente, separar los alimentos crudos de los cocinados, no consumir alimentos perecederos expuestos a temperatura ambiente”, entre otras medidas de seguridad.
Sin embargo, aunque el ciudadano pueda pensar que el peligro de intoxicación puede estar en la calle, Álvarez Nogal destaca que “es una tendencia en los últimos años que se produzcan más brotes de toxiinfecciones alimentarias en los hogares que en los bares”.
Concretamente, en lo que respecta a Castilla y León, la provincia de “Valladolid, seguida de Salamanca y Ávila” fueron las que más brotes tuvieron el pasado verano, aunque la mayoría de los mismos se deben a “accidentes”, “como cuando estás cocinando y vas al baño, regresas sin lavarte las manos y provocas un brote accidentalmente en tu familia”. El director señala que los alimentos más implicados en estos brotes suelen ser los huevos.
Por otra parte, debido a los desplazamientos a los que hacía referencia Álvarez Nogal, “se aumentan los controles de vacunaciones internacionales de los humanos, que se realizan durante todo el año pero en verano se intensifican al producirse más viajes”, apunta.
ACTIVIDADES AL AIRE LIBRE
Otro de los puntos de vigilancia sanitaria son los campamentos y otras actividades al aire libre. “Se incrementa la vigilancia ante los vectores (mosquitos, garrapatas, entre otros) y se intensifican los controles en los campamentos y aguas de recreo y piscinas”, explica.
Para finalizar, el experto resalta el buen funcionamiento del sistema sanitario español, “siempre estamos en contacto permanente todas las administraciones sanitarias. Nos reunimos periódicamente en un calendario que está prefijado y existe un sistema coordinado de alertas para estar informados en todo momento”.