Los rangos de temperatura para monitorizar caballos, demasiado altos

Los rangos de temperatura que son utilizados para medir la salud de los caballos estarían equivocados. Un nuevo estudio, realizado por investigadores de la Nottingham Trent University (NTU) y la Royal Agriculture University y publicado en la revista científica Journal of Equine Veterinary Science, sugiere que la temperatura rectal que se usa como referencia en los equinos es demasiado alta. Según los resultados de la investigación, las guías y la ‘literatura veterinaria’ al respecto es inexacta y serían necesarios más estudios.

La temperatura rectal, objeto del reciente estudio, es fundamental a la hora de determinar factores en la monitorización de la salud de los caballos. De hecho, permite la detección temprana de infecciones y da pistas sobre desordenes que pueda estar sufriendo el animal, como cólicos.

Mientras que los libros que tratan sobre el tema y las diversas fuentes han establecido los rangos de temperatura durante muchos años, no había estudios recientes que buscasen comprobar si estos valores son representativos de la salud equina.

El estudio señala que los parámetros de temperatura previamente publicados eran demasiado altos para la población de caballos estudiada. Concretamente, los nuevos rangos de temperatura rectal de los équidos estudiados son de 36ºC a 38º centígrados. Unos valores que no se corresponden con las publicaciones previas, donde se señala un límite máximo dentro del rango de 38.5ºC, por lo que sería medio grado centígrado más elevado de lo que debería.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores tomaron un total de 652 muestras de la temperatura rectal de 41 caballos sanos, para ello se sirvieron de un termómetro digital que medía la temperatura a una profundidad rectal de 5 centímetros.

La cirujana veterinaria Emily Hall, que ha liderado la investigación, ha explicado que “debido a factores como la resistencia a los antibióticos, el cambio climático y el siempre creciente movimiento de caballos, está aumentando la importancia de que los síntomas de las enfermedades se detecten lo antes posible”.

“Al establecer un rango de referencia específico para la cabaña de la NTU [población de la que ha sido objeto el estudio], ahora podemos estar más confiados en la identificación de caballos que están demasiado calientes o demasiado fríos, y tomar las medidas adecuadas”, ha concluido la investigadora.

En conclusión, el estudio ha descubierto que los rangos de referencia de la temperatura de los caballos, que aparecen en los libros, necesitan ser revisados y actualizados. Ahora tienen el objetivo de repetir el estudio en otras poblaciones equinas, para revisar los valores para todos los caballos del Reino Unido. Un nuevas referencias que seguramente serán extrapolables a otros territorios como España.