Los laboratorios de salud animal apuestan por un enfoque ‘One Health’

El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC por sus siglas en inglés) se une, junto a sus homólogos en cada uno de los países miembros y también ajenos a la Unión Europea, a la Asociación de Laboratorios de Salud Pública (APHL), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la de la Sanidad Animal (OIE) para crear el Programa Global de Liderazgo de Laboratorios (GLLP) cuyo fin es respaldar los sistemas nacionales de laboratorio bajo un enfoque ‘One Health’.

Esta iniciativa surge a raíz de que los recursos disponibles en los laboratorios de países que registran ingresos medios o bajos todavía son limitados, hecho que condiciona la respuesta que pueden ofrecer ante el control de brotes de diferentes enfermedades.

Con el fin de fortalecer cada uno de los sistemas nacionales de laboratorios y suplir la brecha de competencias que surge entre distintos sectores nace el GLLP, que está dirigido a profesionales que trabajan en laboratorios de salud humana, animal y ambiental, agrícolas, de alimentos, químicos y acuáticos.

De esta forma, el GLLP ayuda a garantizar que cualquiera de los laboratorios pueda desempeñar de manera efectiva su labor a la hora de detectar, prevenir y controlar las enfermedades mediante la formación en liderazgo y administración de sus directores y gerentes, a la vez que se adapta a las necesidades específicas de cada país, pudiendo también ser utilizado en cualquier institución educativa del mundo.

Para ofrecer dicha formación, el GLLP propone un marco con el que se pretende armonizar, de forma consensuada, una serie de competencias decisivas para la contribución que hace el papel de los laboratorios en los sectores de la salud humada, animal y medioambiental.

Entre esas competencias se incluyen la comunicación, la gestión de los sistemas de calidad, la bioseguridad, la respuesta a emergencias y la investigación, entre otras. Y todas ellas van dirigidas a mejorar la coordinación entre los sectores de la salud humana, animal y ambiental dado que el beneficio obtenido es recíproco y que todo ello lleva a construir sistemas de salud más sólidos.