Lanzan una campaña para que los veterinarios adopten como pasatiempo la realización de tareas artesanales con el objetivo de que logren un mejor equilibrio entre su vida profesional y personal
Las manualidades como vía de escape para el estrés de los veterinarios
Lanzan una campaña para que los veterinarios adopten como pasatiempo la realización de tareas artesanales con el objetivo de que logren un mejor equilibrio entre su vida profesional y personal
Javier López Villajos - 08-05-2019 - 13:58 H - min.
Las continuas presiones a las que están sometidos los veterinarios debido a las inestables condiciones laborales, los riesgos que van asociados al desempeño de su labor y las represalias que, de un tiempo a esta parte, vienen sufriendo con más asiduidad, hacen que estos profesionales terminen desarrollando numerosos trastornos mentales.
Para evitar que el estrés llegue a perjudicar la salud de los veterinarios, Sarah Taylor y Zoe Daley, enfermeras veterinarias, lanzan el proyecto Crafty Vet, que consiste en realizar manualidades como pasatiempo a la salida del trabajo.
Integrado dentro de la organización Vetlife, que proporciona apoyo psicológico a los veterinarios, el proyecto Crafty Vet pretende reducir el estrés de estos profesionales sanitarios, ofreciéndoles algo constructivo en lo que centrarse cuando terminan su jornada laboral.
Esta iniciativa surgió a raíz de una experiencia personal de Taylor, quien sufría de estrés mientras se sacaba el título de enfermera veterinaria hasta que su madre le regaló un kit de punto de cruz. “Tras pasarme una tarde intentando avanzar en un importante ensayo que debía entregar, cogí el kit de punto de cruz. Un par de horas después me di cuenta de que durante ese tiempo no había pensado ni una sola vez en el trabajo”, detalla Taylor.
Junto a Daley creó este proyecto con la intención de que sirva como herramienta para la relajación de los veterinarios. De esta forma, Crafty Vet ofrece una selección de kits de manualidades que van desde el punto de cruz y el crochet hasta la elaboración de cerveza, queso y jabones, además de la práctica de caligrafía, entre otros.