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PROFESIONALES

¿Cómo leer adecuadamente la etiqueta de un pienso para mascotas?

Los expertos hacen hincapié en la importancia que tiene conocer aspectos del etiquetado del alimento para mascotas, en especial el apartado dedicado a los ingredientes, para garantizar que satisface las diferentes necesidades nutricionales

¿Cómo leer adecuadamente la etiqueta de un pienso para mascotas?

¿Cómo leer adecuadamente la etiqueta de un pienso para mascotas?

Los expertos hacen hincapié en la importancia que tiene conocer aspectos del etiquetado del alimento para mascotas, en especial el apartado dedicado a los ingredientes, para garantizar que satisface las diferentes necesidades nutricionales

Javier López Villajos - 21-01-2019 - 14:00 H - min.

La industria del petfood no deja de expandirse, sacando nuevas variedades de piensos y otros productos alimenticios hechos con fórmulas más saludables, pero los expertos advierten de que muchos propietarios de mascotas desconocen el valor nutricional que aportan cada uno de estos productos, la proporción real de ingredientes que contiene y si el producto en sí es el adecuado para las condiciones que presenta su animal de compañía en cada fase de su vida.

Es por ello que instan a consultar a un veterinario las características que deben buscar en un pienso, sabiendo identificar los compuestos que anuncia el etiquetado del producto. El objetivo, detallan, es ofrecer a la mascota una dieta que satisfaga sus necesidades nutricionales.

UNA CUESTIÓN DE TERMINOLOGÍA

En primer lugar, los expertos señalan la importancia que tiene el nombre del producto, ya que éste no debe confundirse con su marca y los valores que ésta pretende resaltar. De esta forma, el término “pollo” debe incluirse en el etiquetado de un producto que esté hecho al menos con el 70% de este tipo de ingrediente, sin contar el agua que se utiliza para fabricarlo, mientras que si el envasado hace mención al término “con pollo”, es presumible que el producto contenga solo un 3% de pollo.

Otro caso que puede llevar a confusión es el concepto de “sabor a pollo”, que es habitual en el etiquetado de productos alimenticios que solo agregan un pequeño porcentaje de este ingrediente para aportarle sabor al alimento.

ENUMERACIÓN DE INGREDIENTES

Por otro lado, los expertos sugieren que el propietario de una mascota debe conocer la lista de ingredientes que se incluye en la etiqueta del producto alimenticio para garantizar que el animal reciba los nutrientes adecuados y en su justa proporción. De esta manera, los ingredientes deben ser enumerados en orden descendente en función del peso o la cantidad que se haya utilizado de los mismos para la fabricación del alimento.

En este sentido, los expertos ponen de ejemplo que hay ciertos tipos de alimentos que contienen grandes cantidades de agua y es por ello que los propietarios deben consultar el listado de ingredientes secos.

Otro concepto a tener en cuenta es el “subproducto”, y advierten que alimentos publicitados como “de fácil digestión” pueden incluir ingredientes considerados de relleno, como el maíz, el arroz o la patata. Sin embargo, los expertos advierten de que, en el caso del maíz, éste puede presentarse como molido o troceado, reduciendo su cantidad en el alimento final y por tanto, llevando a confusión en el porcentaje de ingredientes que especifica el etiquetado del producto.

PORCENTAJES Y GARANTÍAS

Tras saber identificar lo que quieren decir los términos mencionados en la etiqueta y conocer su lista de ingredientes, los expertos matizan que el fabricante del alimento debe incluir un listado con la cantidad de proteínas, grasas, fibra y agua que contiene el producto. Otros elementos que se deben reconocer son la taurina y el magnesio para los alimentos de gatos, así como los niveles de calcio, fósforo, sodio y ácido graso Omega 6 para los alimentos de perros.

Finalmente, siguiendo estas recomendaciones, un producto alimenticio “completo y equilibrado” debe contener una declaración nutricional que reconozca que dicho alimento contiene la cantidad mínima de nutrientes que el animal requiere, sea cachorro o adulto, que a su vez presentan diferentes requisitos de mantenimiento. También puede ser etiquetado como “para todas las edades de la vida”, si cumple con las necesidades nutricionales que requiere la etapa de crecimiento y reproducción del animal. De no cumplir con ninguno de estos requisitos específicos, la etiqueta del alimento debe especificar que “este producto está destinado, solamente, a la alimentación intermitente o suplementaria”.

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