El grupo de investigación español que trabaja en una vacuna contra la enfermedad hemorrágica epizoótica

Estas últimas semanas la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) está siendo noticia en España. Y es que, tras la llegada de la enfermedad al país a finales del año pasado y un periodo de inactividad durante los meses más fríos del año, se están notificando numerosos focos tanto en bovino como en ciervos del suroeste de España.

En total, en lo que va de año se han registrado más de una decena de focos en bovino y ciervos de las provincias de Cádiz, Sevilla, Huelva, Córdoba, Cáceres, Badajoz y Ciudad Real. Generando los casos en cérvidos especial preocupación en el sector.

Con el regreso de la enfermedad a España, vuelven a surgir las dudas sobre el uso de vacunas para hacerla frente, como ya se hace con enfermedades similares como la lengua azul. Sin embargo, no hay ninguna registrada contra esta enfermedad.

Lo que sí hay son proyectos de investigación para conseguir desarrollar alguna. Es el caso del grupo de investigación de Javier Ortego en el Centro de Investigación en Sanidad Animal del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria, perteneciente a la Agencia Estatal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CISA-INIA-CSIC).

Ortego explica en declaraciones para Animal's Health que, desde su grupo de investigación, que trabaja en vacunas contra la lengua azul y la peste equina, iniciaron los trámites para trabajar con la enfermedad hemorrágica epizoótica tras su llegada a España el pasado año, pero no ha sido hasta mayo de este mismo año cuando han conseguido los permisos para trabajar en modelo de ratón.

De esta manera, con este modelo, que están poniendo a punto con buenos resultados, quieren evitar la complicación de tener que trabajar con todos los animales a los que afecta esta enfermedad, que van desde vacas, hasta ovejas y cabras —aunque sin patología— e incluso ciervos.

Para impulsar su investigación han participado en una convocatoria de la Unión Europea en la que participan junto con investigadores de Brescia, en Italia. Su propuesta es el desarrollo de una vacuna multiserotipo basada en vectores virales, que es más complicada que otras como las inactivadas, que podrían desarrollarse de forma más rápida ante una emergencia.

De momento, ya han empezado a clonar genes del virus para poder luego incluirlos en los vectores virales y probar cuáles son los más efectivos en el modelo, utilizando los conocimientos y la tecnología que han venido desarrollando en los últimos años para vacunar contra el virus de la lengua azul, e intentando ver si todo esto es válido también contra la EHE.

El problema que intentan solucionar frente a las vacunas inactivadas es que, al igual que el virus de la lengua azul, el de la enfermedad hemorrágica epizoótica tiene muchos serotipos, pero las inactivadas solo funcionan contra uno concreto. Además, son virus que se recombinan.

“Nuestra idea es hacer vacunas que cubran un poco el espectro de todos los serotipos, por eso son más complejas, llevan más tiempo”, admite. Este tiempo, adelanta, variará en función de la financiación que reciba el grupo, entre otros factores. Se trata de investigaciones de años, pero la idea es que sea una vacuna que no sea para un brote de un serotipo específico que llegue a España un año, sino que sea multiserotipo.

La buena noticia es que todo el conocimiento que han conseguido estos últimos años con sus vacunas para la lengua azul o la peste equina les será útil. De hecho, ha recordado que se encuentran trabajando también en un proyecto europeo que contribuirá a avanzar en una vacuna frente a la peste equina.

Imagen del equipo de Javier Ortego en el CISA-INIA-CSIC