Extraen un pincho clavado durante cinco meses en el pecho de un perro

Bressie, un perro mestizo de labrador y caniche de nueve años, sorprendió a los veterinarios tras sobrevivir durante cinco meses con un pincho de kebap clavado en su pecho.

Al parecer, Bressie se tragó el pincho de madera durante una barbacoa celebrada en la casa de su propietario durante el pasado verano. Con el tiempo, el pincho logró perforar el esófago y llegó hasta el pecho, donde se quedó clavado.

CINCO MESES DE SÍNTOMAS

Justamente desde aquel verano, Bressie experimentaba una pérdida de apetito y de peso, acompañados por la apatía y el hecho de jadear con más frecuencia de la habitual. Con todo, el animal experimentaba polidipsia o el hecho de beber demasiada agua y poliuria o la necesidad excesiva de orinar.

Sin embargo, fue la aparición de dos bultos en su pecho lo que alertó a su dueño, que la llevó a la clínica Southfields, en el condado de Essex, Reino Unido.

El director de Southfields, Henry L'Eplattenier, declaró que, si bien los bultos no parecían dolorosos, igualmente le realizaron una serie de pruebas de diagnóstico para tratar de descubrir la causa.

UN OBJETO EXTRAÑO QUE EXTRAER

Finalmente encontraron la respuesta gracias a una tomografía computarizada (o TC por sus siglas) del tórax de Bessie, donde los especialistas veterinarios descubrieron un objeto largo y recto situado en la parte inferior de su pecho.

Al tratarse de un objeto extraño, Bessie fue intervenida quirúrgicamente. L'Eplattenier detalló que, tras abrir su pecho en busca de dicho objeto, extrajo “un pincho de kebap de unos veinte centrímetros de longitud”.

Tras comunicarle el hallazgo al propietario de Bessie, éste no supo de qué forma había llegado un pincho de kebap hasta ahí hasta que recordó la barbacoa que celebró en casa durante el pasado verano, considerando ésta como la razón más factible para explicar este caso.

Con todo, L'Eplattenier destaca la "increíble suerte" que tuvo el animal ya que “el pincho perforó todo el conducto que lleva hasta el pecho sin comprometer ningún órgano vital”.

Desde su intervención, Bessie se recuperó por completo.