El plan de tenencia responsable de animales de compañía, llevado a cabo por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, plantea los supuestos en los que un perro necesita adiestramiento.
El plan de tenencia responsable del MAPA aborda el adiestramiento canino
El plan de tenencia responsable de animales de compañía, llevado a cabo por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, plantea los supuestos en los que un perro necesita adiestramiento.
Javier López Villajos - 20-06-2019 - 13:30 H - min.
El plan de tenencia responsable de Animales de Compañía, llevado a cabo el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y que recientemente presentó sus actuaciones en la reunión de la Plataforma Europea de Bienestar Animal, aborda los supuestos en los que un perro requiere de adiestramiento.
Los responsables de este plan lanzan una cuestión sobre si, pese a las muchas virtudes que tenga, un perro está educado. Con esta reflexión pretenden que su dueño valore aquellos momentos en que ha observado gestos que denotan un mal comportamiento por parte del animal, con la intención de que sepa cuando su mascota necesita adiestramiento.
Para ello, los expertos plantean una serie de signos que indican que el perro necesita dicho adiestramiento, como puede ser aquellos casos en que el perro ladra cuando su dueño no está en casa o que no deja de subirse al sofá y a la cama ni de pedir en la mesa para que se le ofrezca comida.
Otro de los signos puede observarse en la calle si el perro se sube a las personas con ánimo de saludar, pudiendo mancharlos o bien que a dicha persona no le guste ese tipo de saludos. De igual forma, un indicativo de que el animal necesita diestramiento puede ser que el perro tire de la correa si ve comida en el suelo, a otros animales a los que llega a tener manía o a personas que van corriendo o en bicicleta, a los que además ladra.
Por el contrario, puede ser la propia actividad de la calle, con el tráfico de gente y los ruidos que circulan por ahí, la que ponga nervioso e irascible al perro. O bien, que una vez que está suelto no responda a las órdenes ni vuelva con su dueño aunque se le ofrezcan premios a cambio.
En caso de identificar al menos tres de estos comportamientos, los responsables del plan consideran que es más que probable que el perro necesite adiestramiento, proceso que, según los expertos, permite disfrutar de una mascota equilibrada con la que se puede acceder a locales dog friendly, además de poder realizar diferentes actividades con él sin miedo a que ocurra ningún percance.
De optar por adiestrarlo, los expertos recomiendan buscar, con el asesoramiento del veterinario, a un adiestrador profesional con experiencia demostrada. Y una vez que empiece el adiestramiento, el dueño debe trabajar mano a mano con el adiestrador para aprender a manejar al perro por su cuenta, ya que una vez que termine la labor del profesional, el animal deberá obedecer a quien considera su propietario.
Así, el dueño aprenderá a reaccionar ante diferentes situaciones durante un proceso que, según los expertos, requiere de paciencia y dedicación, convirtiéndose en una tarea continua que habrá que realizar a lo largo de la vida del animal.