El Colegio de Veterinarios de Madrid y la Consejería de Sanidad han creado un folleto sobre las resistencias a los antimicrobianos y las medidas de prevención, haciendo hincapié en los establecimientos alimentarios
Colvema y Sanidad informan sobre la resistencia a los antimicrobianos
El Colegio de Veterinarios de Madrid y la Consejería de Sanidad han creado un folleto sobre las resistencias a los antimicrobianos y las medidas de prevención, haciendo hincapié en los establecimientos alimentarios
Isabel Gómez - 22-05-2018 - 14:00 H - min.
El Colegio de Veterinarios de Madrid (Colvema) y la Consejería de Sanidad de Madrid han creado un folleto que quiere poner de manifiesto que es necesario proteger a los consumidores frente a los riesgos relacionados con la cadena alimentaria, entre los que se incluye la presencia de bacterias resistentes a los antimicrobianos, según informa el Colvema.
Los antimicrobianos son sustancias que se usan para combatir las bacterias y actúan matándolas, deteniendo su crecimiento y su multiplicación. Son fármacos esenciales en la medicina humana y en la veterinaria.
Las bacterias pueden presentar resistencia a los antimicrobianos, es decir, pueden sobrevivir y reproducirse ante estas sustancias a las que antes eran sensibles. Además pueden adaptarse a situaciones y a medios dañinos para ellas, por lo que esta resistencia a los antimicrobianos es una forma natural de la evolución de las bacterias. El consumo de antibióticos es una de las principales causas de la aparición de estas resistencias.
Como destaca el folleto, las resistencias pueden aparecer en bacterias zoonónicas presentes en un alimento, y pueden acabar comprometiendo la eficacia del tratamiento de una enfermedad infecciosa en humanos.
Hay algunas bacterias que pueden volverse resistentes a varios antibióticos como el Staphylococcus aureus. Esta capacidad de sobrevivir a los antibióticos se puede producir por mutaciones espontáneas que cambian el genoma o por la adquisición de nuevos genes a partir de otras bacterias que ya son resistentes. Este último caso es el más frecuente, según explica la nota del Colvema.
MEDIDAS DE PREVENCIÓN
En la fase de la producción primaria, las medidas de prevención aconsejadas deben centrarse en el buen uso de los medicamentos veterinarios. Además, en las poblaciones de animales se ha ido fijando unos objetivos de reducción de prevalencia de ciertos patógenos que conllevan una detención rápida de animales positivos, favoreciendo su separación y su aislamiento. Otras medidas que favorecen la prevención de diseminación de bacterias resistentes son la limpieza, desinfección y bioseguridad en las explotaciones ganaderas.
En los mataderos, la principal medida preventiva es separar en el espacio o en el tiempo los animales que llegan con un diagnóstico positivo a un patógeno. Empezando desde las zonas de estabulación y continuando por líneas de faenado. También es fundamental impedir la contaminación cruzada durante el desollado y durante la evisceración con medidas que evitarán una diseminación de bacterias resistentes.
En las industrias se deben implantar buenas prácticas de manipulación que eliminen o minimicen la contaminación del producto final. Son medidas fundamentales la separación entre el producto crudo y el producto terminado. También son importantes los envasados eficientes que eviten el desarrollo de bacterias o el control de la temperatura de los alimentos.
En los establecimientos de restauración el Colvema enumera claves que minimizan las contaminaciones, incluidas aquellas producidas por bacterias resistentes. Estas medidas son tener limpias las manos antes de preparar los alimentos y limpiarlas de forma frecuente, y tener limpio el equipo y superficie que se vaya a usar al preparar los alimentos. También, mantener separados los alimentos crudos de los cocinados, cocinar completamente los alimentos para destruir las bacterias que puedan contener, conservar los alimentos a las temperaturas correctas y usar agua y alimentos seguros.