Atacan con pintura al Colegio de Veterinarios de Madrid

La fachada de la sede del Colegio de Veterinarios de Madrid (Colvema) amaneció el pasado 28 de noviembre cubierta de pintura roja y con un comunicado pegado en la puerta.

“Vuestra visión mecanicista y productivista del mundo persigue convertir todo lo vivo en una máquina, en un recurso, en una mercancía. La ingeniería genética, técnica de modificación de los animales para convertirlos en recursos solo persigue la lógica del sistema de convertir todo lo vivo en una mercancía de la cual obtener beneficios”, comienza el comunicado.

El ataque ha sido condenado por diversas entidades del sector. Así, Avatma (Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia y del Maltrato Animal) ha hecho público las imágenes del vandalismo sufrido por Colvema.

Comunicado de AVATMA en contra el ataque a la sede del Colegio de Veterinarios de Madrid https://t.co/gkWpVnzaHW pic.twitter.com/PRko5vTw3U

— AVATMA (@avat_ma) 28 de noviembre de 2018

Asimismo, han manifestado su solidaridad con el Colegio de Veterinarios de Madrid, repudiando el ataque. Desde Avatma defienden “cualquier reivindicación en favor de una vida mejor para los animales y de su máximo bienestar”, pero aclaran que “no toleramos que se utilicen para ello métodos como los que se han empleado, con el objetivo de llamar la atención de la opinión pública”.

Por último, señalan que “los colegios de veterinarios tienen asumido que deben recoger el sentir y las opiniones de la sociedad en todos aquellos aspectos relacionados con los animales, nuestros pacientes, siempre que se utilicen los cauces adecuados desde el civismo y el mutuo respeto”.

Por otra parte, la Asociación Empresarial Madrileña de Veterinarios (Aemve) también ha querido pronunciarse ante tal actuación.

“Queremos hacer público nuestro apoyo al Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid tras la agresión sufrida en su fachada, que ha amanecido cubierta de pintura y pasquines. Esta agresión no solo demuestra el desconocimiento que sus autores tienen de una institución que acoge diferentes sensibilidades, opiniones y criterios científicos; también refuerza la importancia de mantener las discrepancias científicas y éticas dentro de los límites de la educación y el civismo que deben acompañar a cualquier reivindicación”, apuntan.