Un estudio llevado a cabo en perros de la raza Shiba Inu ha caracterizado el microbioma de la piel y el intestino en busca de nuevos tratamientos para la dermatitis atópica canina
El análisis del microbioma ofrece nuevas perspectivas terapéuticas sobre la dermatitis atópica en perros
Un estudio llevado a cabo en perros de la raza Shiba Inu ha caracterizado el microbioma de la piel y el intestino en busca de nuevos tratamientos para la dermatitis atópica canina
Francisco Ramón López - 24-10-2023 - 08:45 H - min.
Las enfermedades complejas (incluidos el cáncer, las enfermedades metabólicas y las alergias) afectan no sólo a los humanos, sino también a los animales domésticos, como los perros. De hecho, aproximadamente el 10% de la población canina sufre dermatitis atópica canina (CAD). Esta conocida enfermedad común en perros se caracteriza por un prurito excesivo y está principalmente causada por una reacción a alérgenos ambientales, como pólenes y ácaros.
La etiología de la CAD es compleja y se cree que la enfermedad se ve afectada por múltiples factores, como la genética del huésped y los factores ambientales. No existe un tratamiento curativo totalmente eficaz para la enfermedad y requiere un tratamiento de por vida para mantener una calidad de vida aceptable.
Estas condiciones de los perros también tienen un impacto significativo en sus propietarios, física, mental y financieramente. Por lo tanto, se necesitan nuevas opciones terapéuticas y/o manejo de la enfermedad mejores y más eficaces para garantizar el bienestar general tanto de los perros como de sus propietarios.
Los microbios han ganado recientemente una atención significativa debido a su papel crucial y su potencial terapéutico para abordar enfermedades complejas comunes, como la dermatitis atópica en humanos. En este campo, la disbiosis (desequilibrio en la comunidad de microbios) en la piel ha sido la mejor abordada en pacientes humanos con dermatitis atópica.
Teniendo todo esto en cuenta, científicos del Instituto de Dermatología Experimental de la Universidad de Lübeck, junto con compañeros de la Universidad de Agricultura y Tecnología de Tokio y Royal Canin, han llevado a cabo un estudio en el que han descrito sistemáticamente composiciones de microbios que residen en la piel y el intestino de perros Shiba Inu adultos. El estudio se publica en la revista Microbiome.
El Shiba Inu es una raza canina que se sabe que es altamente susceptible a la CAD, particularmente en Japón. Para analizar el microbioma, los investigadores tomaron muestras de hisopos de piel de 12 lugares distintos del perro, además de muestras de heces de cuatro grupos diferentes de estos animales.
Estos grupos consistieron en (1) perros con DAC recién diagnosticados sin tratamiento, (2) los mismos perros con DAC después de recibir (oclacitinib; Apoquel) durante 2 semanas, (3) perros con DAC de larga evolución tratamiento a largo plazo con oclacitinib y (4) perros sanos, y perfilaron la composición bacteriana mediante el uso de secuenciación genética.
Con este diseño experimental, compararon el microbioma de perros afectados por CAD con el de perros sanos y evaluaron el impacto del tratamiento con oclacitinib sobre los cambios en la microbiota. Apoquel, de Zoetis, es un medicamento usado en veterinaria para tratar el prurito asociado con la inflamación alérgica de la piel, incluida dermatitis atópica, y bloquea la acción de las enzimas Janus quinasas, que median la picazón y la inflamación.
El hallazgo más destacado del estudio es que las fusobacterias y megamonas son muy abundantes en perros sanos, pero se reducen significativamente en perros afectados por dermatitis atópica. “Después de que los perros afectados por CAD recibieran oclacitinib, esta abundancia bacteriana en sus sistemas volvió a los niveles encontrados en perros sanos. Curiosamente, el cambio de la microbiota causado por el tratamiento fue más prominente en el intestino que en la piel”, explican.
Estos resultados indican que los microbios sirven como posibles dianas terapéuticas y biomarcadores. Además, los investigadores realizaron una secuenciación del ADN mitocondrial completo canino de muestras de hisopos bucales obtenidas de los perros. “Por primera vez, este estudio reveló una asociación de haplogrupos mitocondriales de perros, es decir, una combinación de variaciones genéticas en el ADN mitocondrial, con taxones bacterianos específicos en la piel y el intestino”, explican.
Los investigadores confían en que estos hallazgos se puedan utilizar como base para nuevas estrategias de manejo de enfermedades como la DAC, por ejemplo, mediante el desarrollo de una nueva intervención dietética para reducir las bacterias asociadas con la dermatitis y promover las bacterias asociadas con perros sanos. “Nuevos biomarcadores, como la microbiota específica, ayudarán a evaluar la predisposición a la DAC, la eficacia del tratamiento y el manejo de la salud en perros”, concluyen.