Vectores transmisores de graves enfermedades, algunas de las cuales pueden llegar a causar la muerte, las garrapatas son una especie de interés sanitario en expansión, según datos europeos
Advierten que las garrapatas son “una amenaza sanitaria al alza” en España
Vectores transmisores de graves enfermedades, algunas de las cuales pueden llegar a causar la muerte, las garrapatas son una especie de interés sanitario en expansión, según datos europeos
Redacción - 18-04-2023 - 11:42 H - min.
Con la llegada de la primavera y el buen tiempo comienzan las salidas al campo y las escapadas a zonas rurales. Y, con ellas, el riesgo de picaduras por garrapata. Un riesgo que no para de aumentar en los últimos años debido al crecimiento disparado de esta especie de interés sanitario, transmisora de graves zoonosis, algunas de ellas con capacidad para causar la muerte, como la enfermedad de Lyme, la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo o la encefalitis transmitida por garrapatas, entre otras.
Pero ¿a qué se debe este aumento exponencial de garrapatas? “Fundamentalmente, al cambio climático que, por un lado, está dilatando la época de reproducción de estos artrópodos y, por otro, debido al aumento de las temperaturas, está acelerando su metabolismo. De modo que se reproducen más veces en un mayor espacio de tiempo”, así lo explica el director general de la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla), Jorge Galván, quien además apunta que “este año la falta de lluvias ha favorecido a aquellas especies de garrapatas que no necesitan la humedad para reproducirse”.
Existen muchas especies de garrapatas. En España preocupan especialmente dos de ellas, que son de especial interés sanitario: las garrapatas del género Hyalomma y las del género Ixodes. “La primera de ellas es el principal vector transmisor del virus de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. Mientras que la segunda está involucrada, por su parte, en la trasmisión de una gran variedad de patógenos de importancia clínica-veterinaria, entre los que se encuentra el virus de la encefalitis transmitida por garrapatas y la bacteria de Borrelia, causante de la enfermedad de Lyme”, alerta Galván.
Por ello, desde Anecpla, califican a las garrapatas de “una amenaza sanitaria al alza”, y ruegan extremar las precauciones de la población general en sus salidas al campo e incrementar, por parte de las Administraciones Públicas, las acciones dirigidas al control de este artrópodo ante su incremento disparado.
Como recomendaciones a la población general, Anecpla explica que las garrapatas suelen encontrarse en las hierbas altas en entornos naturales (campo, parques e incluyo en playas) esperando que pase un hospedador —que puede ser bien un humano o un animal— al que adherirse y alimentarse así de su sangre. Por eso, la Asociación ha elaborado un decálogo de consejos para evitar en la medida de lo posible la picadura de garrapatas.
Entre las recomendaciones está vestir ropa de colores claros —donde se pueda advertir con facilidad la presencia de garrapatas—, pantalones largos metidos por debajo de los calcetines, manga larga, gorra y camiseta interior.
Asimismo, aconsejan que, si se pasea con mascotas, asegurarse de que llevan un tratamiento antiparasitario. También aconsejan, evitar tocar al ganado o animales salvajes, utilizar repelentes adecuados, caminar por el centro de los senderos, evitando las orillas donde suelen encontrase las hierbas altas.
Por último, llaman a revisar la posible presencia de garrapatas en personas y mascotas varias vecesdurante y al finalizar el paseo, poniendo especial atención a aquellas partes del cuerpo donde la piel es más final y donde el flujo sanguíneo suele ser mayor, tales como las ingles, las axilas, la cabeza, la parte posterior de las orejas, codos, rodillas, etc.
Jorge Galván indica que “el progresivo aumento de las temperaturas ha convertido a España en un país tan propicio para el desarrollo de las garrapatas como lo es África, por ello su población no para de aumentar en los últimos años. Es fundamental que se activen los protocolos de control necesarios contra esta especie y que, tanto desde las administraciones como desde el sector de la sanidad ambiental y los propios ciudadanos, se realicen labores de prevención”.
El método de control empleado en cada caso variará, tal y como afirma Galván, “en función de la toma en consideración de factores como el ciclo biológico en el que se encuentre la plaga, las condiciones ambientales, el nivel de infestación o la minimización del posible impacto sobre el medio, los animales y el ser humano”. De ahí la importancia, insiste el director general de Anecpla, “de que sean profesionales de la gestión de plagas quienes realicen este servicio de forma profesional”.