JUEVES, 28 de marzo 2024

JUE, 28/3/2024

PROFESIONALES

El 89% de los perros tratados con Stelfonta siguen libres de cáncer un año después

Dos estudios sobre Stelfonta concluyen que la mayoría de los perros tratados se recuperan definitivamente del mastocitoma y que además las heridas tras el tratamiento cicatrizaron sin problemas alrededor de un mes después

El 89% de los perros tratados con Stelfonta siguen libres de cáncer un año después

El 89% de los perros tratados con Stelfonta siguen libres de cáncer un año después

Dos estudios sobre Stelfonta concluyen que la mayoría de los perros tratados se recuperan definitivamente del mastocitoma y que además las heridas tras el tratamiento cicatrizaron sin problemas alrededor de un mes después

Francisco Ramón López - 04-06-2021 - 14:24 H - min.

Los mastocitomas (MCT) son la forma de tumor cutáneo más común en perros (16%—21% de los tumores cutáneos) y casi siempre aparecen en forma de nódulo en la superficie cutánea o debajo de ella.

Aunque existen tratamientos como cirugía o quimioterapia, no siempre son posibles o apropiados. Para estos casos, Virbac dispone de Stelfonta®, una solución inyectable que ofrece una respuesta al tratamiento de tumores localizados no extirpables, por ejemplo, en la parte distal de las extremidades o en una articulación.

Stelfonta® contiene tigilanol tiglato (TT), un éster de forbol extraído de la semilla de un arbusto que se encuentra en los bosques lluviosos de North Queensland y que es capaz destruir completamente el tumor con una sola inyección en el 75% de los casos observados y sin recurrencia en el 93% de los perros a los 84 días.

Qbiotics, los desarrolladores de la fórmula, han llevado a cabo numerosos estudios de efectividad, que han sido publicados en revistas científicas de alto nivel. Un ejemplo es una investigación sobre la eficacia a largo plazo de Stelfonta®, que fue publicada en la revista ‘Journal of Veterinary Internal Medicine’.

Para comprobar el funcionamiento de Stelfonta® más allá de los primeros 84 días, se analizó retrospectivamente un año después el estado de 85 perros cuyos tumores habían sido tratados con éxito y se mostraron completamente recuperados a los 28 días. Los investigadores utilizaron registros de visitas y realizaron entrevistas telefónicas a los propietarios.

Los resultados mostraron que a los 12 meses después del tratamiento con tigilanol tiglato, contaban con datos disponibles de 64 perros. De los pacientes disponibles, 57 (89%) permanecieron libres de tumor en el área de tratamiento y solo 7 (11%) habían desarrollado una recidiva. Todas las recurrencias ocurrieron dentro de los primeros 6 meses, predominantemente (5/7, 71%) dentro de las primeras 12 semanas.

“Estos resultados sugieren que TT administrado por vía intratumoral da como resultado un control tumoral local duradero del mastocitoma tratado en la mayoría de los casos”, defienden los investigadores.

Además, apuntan que las recaídas en pacientes que han sido sometidos a cirugía son mayores, pues llegan al 28% en operaciones con escisión completa y hasta el 38% con la incompleta. También señalan que esto puede variar según el grado del tumor.

CICATRIZACIÓN DE LAS HERIDAS TRAS EL TRATAMIENTO CON STELFONTA

Desde Qbiotics, han querido también analizar la recuperación de las heridas que quedan tras la eliminación del mastocitoma con Stelfonta®, para lo que han llevado a cabo otro estudio, también publicado en ‘Journal of Veterinary Internal Medicine’.

Y es que los investigadores consideran clave valorar la eficacia del TT en cuanto al área y defícit de tejido generado después del desprendimiento del tumor necrotizado en relación con el volumen del tumor antes del tratamiento y también su cicatrización.

Para ello, analizaron los registros clínicos que analizaban el estado y el área de la herida de 117 perros durante 84 días después de un único tratamiento. En estos animales, el desprendimiento del tumor se produjo de 3 a 14 días después del tratamiento, exponiendo el tejido de granulación en el lecho de la herida.

Los autores señalan que en los perros que lograron la resolución completa del tumor, todas las heridas se dejaron cicatrizar por segunda intención (esto se da en una herida abierta, que se cura desde la base hacia arriba, mediante el depósito de tejido nuevo) y solo se requirieron vendajes y otras intervenciones de tratamiento de heridas en 5 perros.

El tiempo de cicatrización (es decir, la reepitelización completa del sitio de tratamiento) dependió del área de la herida y la ubicación en el cuerpo, y la mayoría de las heridas cicatrizaron por completo entre 28 y 42 días después del tratamiento.

Por todo ello, los autores concluyen que el área de la herida y la cicatrización después del desprendimiento de tumores tratados con TT siguen un patrón clínico constante para la mayoría de los perros.

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