Carmena adopta a una cordera de la Casa de Campo

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha visitado este martes 19 de marzo el rebaño de 300 ovejas y 200 corderos que pasta desde principios de mes en la Casa de Campo. Estos animales, que actúan como "bomberos" preveniendo incendios forestales, a la vez que contribuyen a la limpieza de los pastos, a la regeneración del suelo y a la biodiversidad.

El Ayuntamiento de Madrid ya mostró su compromiso de recuperar esta actividad en la última Fiesta de la Trashumancia. Una iniciativa que permitirá desarrollar actividades educativas y culturales.

“Yo acabo de adoptar una cordera y animo a todos los ciudadanos a hacer lo mismo”, ha comentado Carmena, quien también ha remarcado la importancia de la conexión entre el campo y la ciudad, especificando que debería ser “el objetivo del siglo XXI”. “Estoy contenta de que los madrileños puedan disfrutar del mundo rural en Madrid”, ha expresado la alcaldesa, en referencia a que las ovejas de la raza rubia del molar, que están en peligro de extinción y siempre están acompañadas por un pastor, serán un punto de encuentro entre el mundo rural y la ciudad.

Carmena ha adoptado a una cordera, a la que todavía no ha bautizado, gracias a la asociación Campo Adentro que ha puesto en marcha una adopción simbólica, en la que ofrecen apadrinar una oveja por 20 euros anuales o un cordero por 90 euros al año. Los adoptantes reciben a cambio un certificado y una invitación para visitarlas en su zona de pasto.

El Ayuntamiento recupera así una tradición y acerca la naturaleza a los madrileños y visitantes. “A Madrid le faltaba un rebaño. Todas las grandes capitales del mundo tienen uno, porque es esencial conectar la ciudad con el campo”, ha declarado la alcaldesa.

En este sentido, Carmena ha relatado la anécdota de que en el Palacio de las Naciones de Ginebra también hay ovejas “que se encargan de cortar el césped”, en el emplazamiento “de la diplomacia del mundo”.