SÁBADO, 22 de marzo 2025

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MASCOTAS

Veterinarios españoles identifican un nuevo biomarcador para monitorizar la leishmaniosis en perros

Los investigadores han desvelado un nuevo biomarcador que podría ser útil para monitorizar la respuesta al tratamiento y clasificar la gravedad de la leishmaniosis canina en el momento del diagnóstico

Los perros tratados mostraron una disminución significativa de la carga parasitaria en los distintos tejidos evaluados y una variación significativa de varios biomarcadores inflamatorios y renales.
Los perros tratados mostraron una disminución significativa de la carga parasitaria en los distintos tejidos evaluados y una variación significativa de varios biomarcadores inflamatorios y renales.

Veterinarios españoles identifican un nuevo biomarcador para monitorizar la leishmaniosis en perros

Los investigadores han desvelado un nuevo biomarcador que podría ser útil para monitorizar la respuesta al tratamiento y clasificar la gravedad de la leishmaniosis canina en el momento del diagnóstico

Alfonso Neira de Urbina - 23-10-2024 - 10:19 H - min.

La leishmaniosis canina es una afección que puede causar inflamación y enfermedad renal que se considera la principal causa de muerte en perros con esta dolencia. En este sentido, ya se han evaluado diversos biomarcadores inflamatorios y renales para monitorizar la respuesta al tratamiento.

Ahora, un estudio recientemente publicado, realizado por investigadores de la Universidad de Padua y del Departamento de Medicina y Cirugía Animal de la Universidad Autónoma de Barcelona, entre otros, ha realizado un seguimiento del tratamiento a corto plazo de biomarcadores renales e inflamatorios con leishmaniosis de origen natural en 30 perros.

Los investigadores explican que, en el pasado, se han investigado diversos biomarcadores para evaluar la gravedad de la enfermedad y la respuesta al tratamiento contra la leishmaniosis; “Sin embargo, sigue siendo necesario encontrar nuevos marcadores”.

Así, en el estudio, 30 perros diagnosticados de leishmaniosis fueron divididos en diferentes grupos en función del grado de la enfermedad y evaluados en el momento del diagnóstico y tras el tratamiento anti-Leishmania.

“Este estudio evaluó la carga parasitaria, diversos biomarcadores inflamatorios y renales antes y después del tratamiento, y cualquier asociación entre las variables estudiadas y el grado de gravedad de la enfermedad en el momento del diagnóstico”, recuerdan los investigadores

De esta manera, evaluaron la carga parasitaria en la médula ósea, la sangre y la orina, investigada previamente, así como nuevos biomarcadores inflamatorios y renales antes y después del tratamiento.

Concretamente, midieron biomarcadores previamente estudiados y varios marcadores inflamatorios y renales nunca investigados en la leishmaniosis canina, como el fibrinógeno, la antitrombina, la excreción fraccional urinaria de sodio y la relación amilasa/creatinina urinaria antes y después del tratamiento (antimoniato de meglumina o miltefosina + alopurinol).

Los perros tratados mostraron una disminución significativa de la carga parasitaria en los distintos tejidos evaluados y una variación significativa de varios biomarcadores inflamatorios y renales.

“Entre varios biomarcadores, se identificó uno nuevo que podría ser útil para monitorizar la respuesta al tratamiento y clasificar la gravedad de la enfermedad en el momento del diagnóstico”, remarcan los investigadores.

El estudio ha desvelado que, tras el tratamiento, la antitrombina y el cociente amilasa-creatinina urinario cambiaron significativamente (p < 0,001, respectivamente). El cociente amilasa-creatinina urinaria, la capacidad total de fijación del hierro y la antitrombina fueron las variables más fuertemente asociadas con la gravedad de la enfermedad (p < 0,005, respectivamente).

“El cociente amilasa/creatinina urinaria puede ser un marcador útil para monitorizar la respuesta al tratamiento y clasificar el grado de gravedad de la enfermedad”, concluyen los investigadores.

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