No conocer la edad exacta del gato puede ser perjudicial para su salud

Según un animal de compañía va haciéndose mayor sus necesidades varían, en ámbitos como la alimentación, los cuidados diarios o incluso la asiduidad con la que debe acudir al veterinario. El problema es que, en algunas ocasiones, los propietarios obtienen a sus mascotas en unas circunstancias que les impiden conocer su edad exacta, algo que, especialmente en el caso de los gatos, puede ser perjudicial para su salud.

La Facultad de Veterinaria de la Universidad de Liverpool cuenta con una clínica que ofrece un servicio dedicado específicamente a mejorar la salud y el bienestar de los gatos mayores y está llevando a cabo una línea de investigación que estudia a los pacientes que los propietarios llevan al centro, para obtener una mejor comprensión del proceso de envejecimiento de esta especie.

De momento, desde su apertura, la clínica ha examinado a casi 200 gatos, y ha obtenido algunas conclusiones, como que el 40% de los gatos sufre de una enfermedad dental ya en su primera visita.

Asimismo, han comprobado que el 61% de los propietarios ha notado cambios en el comportamiento y la actividad de sus gatos con la edad. Los más comunes son la exigencia de más atención y un mayor número de horas de sueño.

Un 21% de los dueños señala que sus gatos se han vuelto más cariñosos con las personas a medida que han ido envejeciendo.

UN 30% DE LOS DUEÑOS NO CONOCE LA EDAD DE SU GATO

La clínica también tiene como objetivo buscar si realmente son precisas las edades de los gatos que los dueños les comunican. Hasta el momento han encontrado que las edades transmitidas por el 70% de propietarios de pacientes examinados eran precisas o con una estimación cercana probable (alrededor de un año), pero el otro 30% eran inexactas.

“Hemos descubierto que los gatos que parecen mayores de la edad registrada en su registro veterinario tienen más probabilidades de tener mala salud. Como muchos gatos se obtienen sin saber su edad, esto nos dice lo importante que es realizar chequeos regulares con un veterinario para controlar su salud”, apunta Nathalie Dowgray, una de las veterinarias de la clínica.

La profesional aconseja que conocer que una mascota está ya en una edad avanzada permite a los propietarios comprender mejor el impacto que el envejecimiento tiene en sus animales y actuar en consecuencia.

La universidad señala que, hasta la fecha, hay muy poca investigación sobre el envejecimiento “saludable” de los gatos —sin intervención de enfermedades—, un proceso que, según los estudios disponibles, comienza a partir de los siete años de edad.

Algunas de las enfermedades que aumentan su prevalencia a partir de esta edad son los trastornos renales, el hipertiroidismo, la hipertensión, la diabetes, la enfermedad cardíaca y la osteoartritis.