Las gastritis, las enteritis, o la ingesta de cuerpos extraños se encuentran entre las causas de las 5 urgencias veterinarias más frecuentes en Navidad, y según expertos del sector veterinario, todas se pueden evitar
Las urgencias veterinarias navideñas más comunes se pueden prevenir
Las gastritis, las enteritis, o la ingesta de cuerpos extraños se encuentran entre las causas de las 5 urgencias veterinarias más frecuentes en Navidad, y según expertos del sector veterinario, todas se pueden evitar
Redacción - 26-12-2019 - 16:58 H - min.
La Navidad es, tradicionalmente, un periodo de fiesta en el que las personas aprovechan para pasar en familia en todo Occidente. Gran parte de las empresas cierran durante estas fechas y la actividad profesional se toma unos días de descanso. Sin embargo, algunos puestos de trabajo como los sanitarios, debido a sus características particulares, deben estar cubiertos, para realizar guardias y atender emergencias; algo que comparten médicos, farmacéuticos, enfermeros y veterinarios.
Las fiestas entrañan ciertos peligros para los animales de compañía y determinados problemas con los elementos navideños son compartidos por las mascotas. En este sentido, la oficial jefa veterinaria de la aseguradora Veterinary Pet Insurance, Carol McConnell, ha recopilado las 5 urgencias veterinarias más comunes que se producen en Navidad.
Estas situaciones, según explica McConell, están motivadas por una sensación de urgencia o de “emergencia total”, ya que los propietarios, así como los veterinarios que tienen que tratar a los animales, sacrifican parte de sus vacaciones para atender las necesidades de los animales.
Sin embargo, las urgencias veterinarias más habituales, basadas en información proveniente de más de medio millón de asegurados, se pueden prevenir y, por ello, McConell no solo ha compartido una lista con las visitas más frecuentes, sino también la forma de evitar tener que acudir al veterinario en una fecha tan señalada.
En primer lugar, y encabezando la lista de las urgencias veterinarias más comunes en Navidad, se encuentran las gastritis y las enteritis. Un malestar estomacal o intestinal grave, con síntomas que incluyen vómitos y diarreas.
Este problema se suele dar en las fiestas navideñas porque el animal roba comida o es sobrealimentado, recibiendo premios o comida extra a su dieta. Para evitarlo, la veterinaria recomienda que se pida a quien visite la casa que no dé comida a los animales de compañía sin permiso, así como mantener los alimentos fuera del alcance del animal y, si fuese necesario, apartar al perro hasta que termine el tradicional almuerzo o la cena. También aconseja “tener a mano” golosinas apropiadas para ofrecérselas a las mascotas con moderación.
La segunda urgencia veterinaria más común son las laceraciones o las heridas por mordedura. Las mascotas se ven obligadas a pasar las fiestas con otros miembros de su especie y, al igual que ocurre con los humanos, esto puede degenerar en peleas. Por ello, una solución es pedir a los invitados que no traigan a sus animales de compañía si esta situación puede molestar al gato o al perro de la casa. Otra solución es separarlos en diferentes habitaciones, para evitar disputas territoriales y que uno de los animales termine en la sala de urgencias.
Por otro lado, los traumatismos en el tejido blando ocupan el tercer puesto de la lista de las urgencias veterinarias más comunes de Navidad. Como explica McConell, esta es la categoría más amplia, que incluye diversos problemas que puede tener una mascota, desde que sea atropellada, tras escapar de la casa por que un invitado se ha dejado la puerta abierta, hasta que alguien pise al animal sin querer.
Para prevenir estas urgencias, el propietario de la casa debe vigilar a sus animales de compañía y a sus invitados para evitar accidentes. Además, como ya ocurría con los mordiscos y heridas, mantener las puertas cerradas puede evitar percances, como, por ejemplo, que una persona mayor tropiece con un gato, lo que puede provocar una visita tanto a las urgencias veterinarias como al hospital de humana.
INGESTA DE CUERPOS EXTRAÑOS Y TOXICIDAD DEL CHOCOLATE
En cuarto lugar, durante el día de Navidad es común que los veterinarios se enfrenten a casos en los que una mascota ha ingerido un cuerpo extraño. En este sentido, los veterinarios se encuentran casos de todo tipo, ya que un animal de compañía puede ingerir cualquier tipo de cuerpo extraño.
La mejor prevención, según indica McConell, en estos casos es tener todo recogido y recordar a los invitados que hay elementos, como la ropa sucia, que son atractivos, y peligrosos, para las mascotas. Esto evitará que los animales intententen ingerir objetos que después requieran de cirugía para poder ser extraídos.
Por último, el envenenamiento por chocolate es otra causa común de urgencia veterinaria durante estas fechas. Este alimento está incluído en la lista de los más toxicos y, por lo tanto, los que nunca deben ofrecerse a los animales de compañía.
En este sentido, McConell recuerda que la toxicidad del chocolate aumenta cuanto más oscuro es el chocolate y más pequeño el perro que se lo ha comido. Por ello, un perro pequeño que come chocolate negro debe acudir de inmediato al veterinario, pero un perro grande que ha ingerido un poco de chocolate con leche probablemente “se encuentre bien”, señala la veterinaria, quien, sin embargo, apunta que lo más recomendable es preguntar siempre al veterinario.
Este tipo de urgencias se previenen manteniendo los dulces, no solo el chocolate, fuera del alcance de los perros, y recordando a los invitados que hagan lo mismo. Este punto es importante, ya que hay dulces sin azúcar que incluyen xilitol, sustancia extremadamente venenosa para los perros.