Piden a veterinarios concienciar sobre la salud de perros braquicéfalos

La Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA, por sus siglas en inglés) ha recogido un comunicado de la directora ejecutiva de la Asociación Internacional por los Perros (IPFD), Brenda Bonnett, donde se persigue informar de los riesgos para la salud frecuentes del bulldog francés, raza braquicéfala.

“No hay nada intermedio en esta raza”, apuntan en el comunicado. “Desde clubes de razas que publican videos de perros corriendo y disfrutando; a activistas que señalan que los perros braquicéfalos ven comprometidos su salud y su bienestar a causa de sus rasgos extremos; celebridades que abrazan a su bulldog francés; a investigaciones recientes que destacan el apego extremo de los dueños, a pesar de las altas facturas del veterinario, el trauma emocional y el sufrimiento crónico del perro: los hechos y los sentimientos empujan los límites en todas direcciones”, señalan.

Asimismo, apuntan que el número de propietarios con bulldog franceses ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años en “muchos países”. “Esto ha ocurrido a pesar de los diferentes programas educativos destinados a convencer al público de que no compre estos perros, a la industria y a los medios de comunicación no a promoverlos”, explican en el comunicado desde la IPFD.

Un enfoque cada vez mayor en la investigación sobre el síndrome obstructivo respiratorio braquicefálico (BOAS), las estadísticas basadas en la población, sobre el riesgo no solo de problemas respiratorios, sino también de problemas oculares, cutáneos, inmunitarios, locomotores y tasas impactantes de problemas espinales y neurológicos, no parecen influir en los amantes de estos perros.

La creciente presión del público y de los grupos de bienestar, las agendas políticas y la verdadera preocupación han fomentado numerosas acciones legislativas relacionadas con los braquicéfalos dirigidas de diversas formas a restringir la reproducción, cambiar los estándares y abordar el bienestar comprometido.

Por otro lado, se ha dejado notar el rechazo de ciertos sectores de la comunidad hacia la exhibición de estas razas braquicéfalas y las organizaciones veterinarias están interviniendo. “Los veterinarios se enfrentan al desafío de abordar los problemas de salud y bienestar de estos perros sin normalizar problemas importantes ni crear una desconexión con el propietario; y deben considerar las implicaciones éticas del tratamiento y la cirugía en estos animales”, apuntan.

“Los profesionales y las organizaciones veterinarias deben comprender la complejidad de estos problemas y determinar cómo pueden servir mejor a la sociedad, a las personas y, lo que es más importante, a los perros”, concluyen.