Los expertos señalan que la tolerancia de los animales al frío no es tan alta como se cree y por ello recomiendan ofrecerles una dieta que satisfaga sus diferentes necesidades nutricionales
La reserva de calorías, fundamental para combatir al frío
Los expertos señalan que la tolerancia de los animales al frío no es tan alta como se cree y por ello recomiendan ofrecerles una dieta que satisfaga sus diferentes necesidades nutricionales
Javier López Villajos - 25-01-2019 - 14:30 H - min.
Numerosos profesionales coinciden en que los animales son sensibles a los cambios de temperatura, destacando que su tolerancia al frío puede variar en función de diferentes factores. Por esa razón, los expertos de la Asociación Americana de Medicina Veterinaria (AVMA por sus siglas en inglés) enumeran una serie de pautas para mantener resguardados del frío tanto a los animales domésticos como a los de granja.
En primer lugar, los expertos señalan que, de entrada, el frío puede empeorar condiciones de salud ya existentes en las mascotas, véase el caso de la artritis, diabetes, enfermedades cardíacas o renales y el síndrome de Cushing. También hacen una recomendación especial para aquellos perros de corta y avanzada edad, ya que son más susceptibles a las temperaturas extremas, además de encontrar problemas a la hora de caminar sobre un terreno helado sin lesionarse.
Por otro lado, advierten que factores como las reservas de grasa corporal y el nivel de actividad también influyen en la resistencia al frío que ofrecen estos animales. Ponen de ejemplo a las razas de perro de pelo corto, que sienten el frío más rápido ya que tienen menos protección, de igual forma que aquellas razas de perro con las patas cortas son más sensibles a la bajada de las temperaturas ya que es su vientre entra más en contacto con el frío del suelo.
ÁCIDOS GRASOS, VITAMINA E Y SUPLEMENTOS
Es, por todo ello, que los expertos centran sus esfuerzos en concienciar sobre la importancia que tiene la alimentación, ya que un aumento del peso del animal no le brinda más protección contra el frío, sino que le pone en riesgo de sufrir problemas de salud. Aunque sí que afirman que algunas mascotas pueden requerir de más calorías para generar suficiente calor corporal, cuestión que se deberá tratar con un veterinario, quien puede sugerir una dieta rica en ácidos grasos esenciales como el Omega 3, vitamina E que refuerza la barrera natural de la epidermis del animal y los suplementos con antioxidantes.
Los expertos también instan a que tanto perros como gatos permanezcan dentro del hogar durante las rachas de frío, tal y como evidenció un veterinario durante un experimento donde desmitificó la creencia popular de que el pelaje de estos animales los aisla del frío. Y es que, de permanecer demasiado tiempo a la intemperie, las mascotas, al igual que las personas, pueden sufrir hipotermia. Con todo, proponen que la cama del animal esté a una altura prudencial con respecto al suelo y lejana de las ventanas, para minimizar así la pérdida de calor corporal debido a la exposición del frío.
Y en el caso de sacarlos de paseo, proponen que éstos sean cortos, tras los que conviene revisar las patas del animal para comprobar que no presentan ningún tipo de lesión a causa del frío. Una evidencia clara es que las almohadillas se agrietan e incluso pueden sangrar. De igual manera, hay que estar atento a que el perro no cojee ni que arrastre restos de anticongelante u otros productos químicos que se utilizan durante esta temporada ya que son tóxicos para ellos si lamen la zona impregnada. De ahí la importancia de limpiarlos a la vuelta de estos paseos.
LA PROTECCIÓN DEL GANADO CONTRA EL FRÍO
Los expertos recuerdan que también es importante garantizar la salud y el bienestar de los animales de granja. Por ello, proponen la realización de un examen veterinario con el que detectar de manera precoz cualquier afección que pueda verse comprometida por las inclemencias del tiempo. Así, el profesional puede pautar, además de vacunas y tratamientos de desparasitación, suplementos nutricionales para aquellos casos en que sea necesario.
Igualmente remarcan los problemas que suscitan el viento y la lluvia en el caso del ganado, al que le producen un mayor gasto de calorías. De esta manera, es necesario tratar con un veterinario la aplicación de una dieta que satisfaga las necesidades nutricionales que tiene cada animal, sin olvidar la importancia que tiene el acceso a agua fresca. Y esto, junto con un refugio estructural que proporcione una ventilación adecuada ayudará a garantizar el bienestar de los animales en las explotaciones ganaderas durante la temporada de frío.