Una veterinaria especializada en oncología propone una escala compuesta por siete parámetros que sirve para evaluar cuándo la eutanasia es la solución más compasiva para aliviar el sufrimiento de una mascota anciana o enferma
Escala veterinaria para decidir el momento de eutanasiar a una mascota
Una veterinaria especializada en oncología propone una escala compuesta por siete parámetros que sirve para evaluar cuándo la eutanasia es la solución más compasiva para aliviar el sufrimiento de una mascota anciana o enferma
Javier López Villajos - 26-03-2019 - 14:30 H - min.
En muchas ocasiones los dueños de mascotas ancianas o que están enfermas soportan sus achaques pese a que el progresivo deterioro de la calidad de vida del animal es evidente. Y es que, pese a consultar al veterinario sobre las opciones que tiene, la decisión acaba recayendo en el propietario, quien duda sobre si la mascota todavía puede recuperarse, o no, del revés que está sufriendo.
Es por ello que, Alicia Villalobos, veterinaria especializada en oncología, propone utilizar una “Escala de la calidad de vida” para determinar cuando es el momento de eutanasiar a una mascota anciana o enferma para que deje de sufrir.
De esta forma, Villalobos incluye en dicha escala seis categorías que a su vez disponen de un rango de puntuación valorado de 0 (poco) a 10 (mucho). La puntuación que se otorgue a cada una de las categorías debe basarse en cómo es la calidad de vida de la mascota y si depende en mayor o menor medida del propietario para seguir adelante.
El primer factor a valorar es el dolor que experimenta la mascota. Villalobos hace hincapié en si éste puede ser gestionado de manera exitosa con los tratamientos prescritos por el veterinario. Así, la veterinaria recuerda que es importante que el dueño mida la capacidad de respiración que tiene el animal y si, en algún caso, necesita oxígeno.
Otro parámetro a tener en cuenta es el hambre, que hace referencia a si la mascota come lo suficiente, si puede hacerlo por sí misma o si necesita una sonda gástrica. De igual forma, la hidratación es fundamental, ya que el propietario debe preguntarse si el animal de compañía bebe agua de forma regular.
El cuarto parámetro a valorar es el relativo a la higiene. La experta señala que hay que observar si el pelaje del animal está limpio y suave, o si, por lo contrario, presenta úlceras en la piel. Otro factor decisivo es la movilidad, cuestión relevante que depende de si la mascota puede levantarse sin ayuda, si tiene ganas de salir a pasear o si suele tropezar o caerse al hacerlo.
Por último, Villalobos señala la importancia de la felicidad del animal. Por ello es crucial que el dueño observe si la mascota se muestra alegre y si responde a los estímulos que le rodean, o si, por lo contrario, está aletargada, sufre crisis de ansiedad o se mantiene aislada del resto de la familia. Con todo, la experta aconseja medir si los días buenos superan a los malos que tenga el animal.
Tras sumar la puntuación recogida en todas las categorías, si el resultado es mayor o igual a 35, la veterinaria sugiere que la mascota todavía puede beneficiarse de los cuidados que le aporta su dueño. Sin embargo, de bajar esa cifra, la experta recomienda consultar al veterinario si la opción de la eutanasia sería oportuna para que la calidad de vida del animal no empeore aún más, especialmente si la puntuación es alta en la categoría de daño pese a que el resto de parámetros tengan puntuaciones más bajas.