Reino Unido pone en marcha un código de bienestar avícola

La Asociación Veterinaria Británica (BVA), la Asociación Británica de Avicultura (BVPA) y la Asociación de Salud Publica Veterinaria (VPHA) han acogido un nuevo código de práctica para el bienestar de las gallinas ponedoras y las gallinas jóvenes que se presentó recientemente en el Parlamento británico, según BVA.

Este nuevo código está formado por una serie de normas de bienestar que están actualmente revisadas y actualizadas por el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra).

El presidente de la Asociación Veterinaria Británica, John Fishwick, se ha mostrado muy satisfecho, “damos una calurosa bienvenida a estas actualizaciones y nos complace especialmente ver el papel vital que desempeña la profesión veterinaria en el mantenimiento del bienestar avícola reconocido a lo largo del nuevo código”, explicó.

Por otro lado, también reconoció que la Asociación Veterinaria Británica está muy contenta de ver los “beneficios de los sistemas de vigilancia veterinaria, ya que los propietarios y cuidadores están animados en usar fuentes locales y nacionales de vigilancia de enfermedades para comprender mejor los patrones de las enfermedades avícolas y su salud y bienestar local”.

“También nos complace ver la señalización en el Código de Prácticas de la Humane Slaughter Association para la eliminación de los criaderos de pollos, que describe en detalle la información sobre métodos humanos de sacrificio y buenas prácticas”, continuó Fishwick. Además, el presidente reconoce que “la industria avícola británica tiene algunos de los estándares de bienestar más altos del mundo y la profesión veterinaria está totalmente comprometida a trabajar con Defra para mejorar aún más los códigos de bienestar animal para reflejar las mejores prácticas de la industria".

CÓDIGO DE BIENESTAR PARA LAS GALLINAS

El bienestar de estas gallinas está dentro del marco desarrollado por el Comité de Bienestar de animales de Granja. Por ello se han formulado las “5 libertades” que forman los principios rectores para la evaluación del bienestar dentro de cualquier sistema, junto con las acciones necesarias para salvaguardar el bienestar dentro de las limitaciones de una industria ganadera eficiente.

La primera libertad es la de hambre y sed, ya que los animales tienen que tener un acceso rápido a agua y una dieta que mantenga un buen estado de salud. También la libertad de molestia, ya que se les tiene que proporcionar un entorno apropiado que incluya refugio y una zona de descanso. En el tercer caso, está la libertad de dolor, lesiones y enfermedades, mediante prevención o diagnósticos rápidos.

La cuarta libertad es la de expresar el comportamiento normal, puesto que los animales tienen que tener un espacio suficiente, instalaciones adecuadas y la compañía de otros animales. Por último, se debe garantizar las condiciones y el tratamiento adecuado para evitar el sufrimiento mental.

Por otro lado, hay otros elementos esenciales como conocer la crianza del animal, su biología y la mejor forma de satisfacer sus necesidades; que se tenga unas habilidades observación, manejo, cuidado y tratamiento de animales, y detección y resolución de problemas.; y por último, una afinidad y empatía con los animales, dedicación y paciencia.