Filomena: Ganaderos de Madrid denuncian no poder alimentar a sus animales

Los estragos del temporal Filomena que aún pueden contemplarse en las ciudades y pueblos de España han obligado a frenar el ritmo de vida de la población debido a la gran cantidad de nieve acumulada en calles y caminos. Pero hay actividades como la veterinaria y la ganadería que no pueden detenerse ni aun frente al temporal.

En este sentido, algunas zonas de España están más acostumbradas a las intensas nevadas y han reaccionado a tiempo, permitiendo que veterinarios y ganaderos continúen con sus importantes actividades. Sin embargo, en otras zonas como en la Comunidad de Madrid, parece que se está complicando la gestión de la crisis ocasionada por el temporal. 

De hecho, desde la Unión de Agricultores, Ganaderos y Silvicultores de la Comunidad de Madrid (UGAMA) han lamentado los daños ocasionados por la borrasca Filomena que ha tenido lugar durante el pasado fin de semana y han instado a la Administración de la Comunidad y a las locales a que desbloqueen rápidamente los accesos a granjas y explotaciones donde muchos animales se han quedado atrapados.

Así, UGAMA se ha hecho eco de las consecuencias que Filomena ha traído en el campo madrileño, habiendo destruido muchas construcciones agrícolas y ganaderas, hundido techos por el peso de la nieve y, sobre todo, dejando atrapado a muchísimo ganado y poniéndolo en serio peligro, algunos sepultados bajo escombros.

Por ello, desde la organización reclaman que se liberen cuanto antes los accesos y critica que no se esté tomando la actividad agrícola y ganadera como esencial, cuando ya se ha demostrado durante todo 2020 que sí lo es y los productores han estado al pie del cañón.

EL GANADO PODRÍA MORIR DE HAMBRE

“No hay manera de acceder a nuestro ganado”, comenta un ganadero de Colmenar Viejo. “La realidad es que está todo intransitable y tenemos miedo de que nuestros animales mueran ante la imposibilidad de acudir a alimentarles”.

La misma situación, explican desde UGAMA, se repite en otras áreas de la Comunidad como en Canencia, donde muchos ganaderos tienen que desplazarse andando kilómetros, con la nieve hasta las rodillas y con la amenaza que supone caminar por ciertas zonas con placas de hielo, para poder acceder al ganado.

“Asimismo, a esto se le suma la posible pérdida de pastos por las heladas y el increíble aumento de costes al tener que utilizar forraje y pienso para alimentar a los animales, además del desembolso de arreglar las infraestructuras rotas”, lamentan desde la organización.

“No somos ciudadanos de segunda y la Administración, la local y la de la Comunidad, nos tiene que dar una solución pronto”, critica Alfredo Berrocal, presidente de UGAMA. “Cada minuto cuenta y estamos ya en tiempo de descuento. Necesitamos que se despejen los accesos con la mayor celeridad posible”, concluye.