Anuncian un nuevo tratamiento para los tumores cutáneos caninos

A finales del año 2019, el Comité de Medicamentos de Uso Veterinario de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) adoptó una opinión favorable sobre la comercialización de STELFONTA®, un nuevo medicamento veterinario para tratar los mastocitomas en perros. Virbac, que distribuye el tratamiento, señala que estará disponible en España a partir de junio de 2020.

El nuevo fármaco consiste en una solución inyectable para tratar el mastocitoma canino, que es la forma de tumor cutáneo más común en perros (entre el 16% y 21% de los tumores cutáneos) y casi siempre aparece en forma de nódulo en la superficie cutánea o debajo de ella.

Este fármaco ha sido desarrollado por los laboratorios QBiotics, con los que se ha asociado Virbac, y contiene tigilanol tiglato, un éster de forbol extraído de la semilla de un arbusto que se encuentra en los bosques lluviosos de North Queensland, Australia: Fontainea picrosperma. Es un tratamiento tumoral dirigido que no requiere medicación a largo plazo ni anestesia general.

Virbac explica que ya existen tratamientos como la cirugía y la quimioterapia, pero “no siempre son posibles o apropiados en según qué casos”. “También suponen el uso repetido de medicación o anestesia, lo que puede ser preocupante para el propietario o estar contraindicado para el propio animal”, añade.

La compañía francesa explica que el nuevo tratamiento significa para los veterinarios de Europa “una nueva opción que completa los tratamientos orales y quirúrgicos disponibles actualmente”. Asimismo, apunta que ofrece una respuesta al tratamiento de tumores localizados no extirpables, por ejemplo, en la parte distal de las extremidades o en una articulación.

La multinacional señala que se trata de una opción “para conservar una mejor calidad de vida, tanto para el animal como para su propietario, puesto que suele ser suficiente un único tratamiento para destruir completamente el tumor en el 75% de los casos observados”.

Asimismo, añaden que aporta una elevada tasa de eliminación del tumor, una rápida cicatrización y un rápido retorno a una buena calidad de vida para el animal. “En los casos estudiados se destruyó el tumor en 7 días y se apreció una cicatrización en más del 95% de los casos, sin efectos adversos significativos para el perro,” explica Christelle Navarro, directora médica y de marketing global de Virbac.