Nuevas críticas al programa contra la violencia de género que exige descuentos a veterinarios

Recientemente se conocía el dossier del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 en el que indicaba a los veterinarios cómo estos profesionales podían colaborar con el proyecto Viopet, destinado a la atención y acogida de animales de víctimas de violencia machista.

En el documento se señalaba que, para poder participar en el proyecto, los veterinarios deben ofrecer una serie de descuentos mínimos en sus servicios, de hasta el 50%, apelando a la vocación del colectivo; y se apuntaba que el proyecto atendería tanto a animales identificados, como sin identificar.

Tras conocerse esto, desde el sector veterinario han comenzado a producirse críticas hacia el Ministerio. Así, desde el Colegio de Veterinarios de Alicante reprocharon que el Gobierno apelara a su vocación para costear su campaña de violencia de género y que se equipare a los animales identificados con aquellos que no lo están.

A estas críticas también se ha sumado la Confederación Empresarial Veterinaria Española (Ceve) que, mediante una carta dirigida al director general de Derechos de los Animales, ha mostrado su “decepción” en relación al proyecto Viopet, ya que, según señalan, “a pesar de haber mantenido contactos con la Dirección General y haber intervenido activamente en los periodos de participación pública que se han abierto, la Confederación no ha sido informada acerca de este proyecto en el que se pide la colaboración de los veterinarios a través de sus actuaciones en los centros sanitarios veterinarios”.

En este sentido, Ceve lamenta que el programa Viopet proponga que las empresas asuman los costes y el esfuerzo, modificando sus protocolos, formando a sus empleados y poniendo sus instalaciones a disposición de dicho programa.

Además, la patronal recuerda que “debe tenerse en cuenta que en un sector compuesto mayoritariamente por micropymes, que no pueden disponer de servicios de seguridad, el actual programa pone en riesgo la integridad física y emocional de nuestro personal, mayoritariamente femenino, a consecuencia de las situaciones conflictivas y violentas que sin duda se darán”.

“El Estado no puede omitir su responsabilidad derivando la financiación de este proyecto desde los Presupuestos Generales del Estado hacia las aportaciones del sector veterinario, formado fundamentalmente por microempresas y autónomos”, critican desde la patronal.

Por otro lado, Ceve señala que reconoce y respeta la dignidad de las víctimas de violencia y, subraya que “no se debe contribuir a su victimización a través de su exposición pública. Para ellas, cada ocasión en la que deben exponer esta condición es una situación en la que el dolor se aviva y debemos articular los protocolos que sean necesarios para evitar, en la medida de lo posible, contribuir a su sufrimiento”.

BAJAR EL IVA VETERINARIO PODRÍA AYUDAR A LAS VÍCTIMAS DE VIOLENCIA DE GÉNERO

Por ello, propone que se facilite el acceso de las víctimas de violencia a un servicio sanitario esencial, como es el prestado por los centros sanitarios veterinarios, mediante la disminución del coste de estos servicios a través de la reducción del IVA que los grava, “medida que su administración tiene en su mano establecer muy fácilmente y que es ampliamente demandada por el conjunto de la sociedad y de todo el espectro político”.

Aparte de Ceve, desde el Colegio de Veterinarios de Córdoba han criticado que el colectivo tenga que asumir costes derivados del programa del Ministerio de Derechos Sociales. De esta manera, en un comunicado emitido por el colegio, se lamenta que “el programa se fundamenta en la solidaridad del profesional veterinario para prestar sus infraestructuras, su formación y sus conocimientos sin recibir nada a cambio”.

También, desde el colegio de Córdoba recuerdan que el veterinario, “se paga todos sus permisos para abrir y mantener su negocio, abona la seguridad social y todo tipo de impuestos (incluido un injusto IVA) sin recibir ninguna ayuda del Estado”, destacando que es “un profesional, que sencillamente ha de cobrar por sus servicios para poder subsistir y seguir pagando impuestos”.

“Viopet es un programa de la Administración para ayudar a luchar contra una importante lacra como es la violencia de género, por lo que deben cubrirlo sus fondos y no dejarlo a la solidaridad del veterinario. No se entiende por qué se solicita, como siempre, un esfuerzo añadido al veterinario. ¿Hacen lo mismo con otras profesiones implicadas en mayor o menor medida con el maltrato?; si un veterinario decide participar en el proyecto ¿podrá solicitar una rebaja del IVA o del IRPF, ya que se trata de una colaboración con el Estado?”, concluyen desde el Colegio de Veterinarios de Córdoba.