Las empresas del sector veterinario se adaptan al estado de alarma

Este sábado 14 de febrero, tras un Consejo de Ministros extraordinario, se decretó el estado de alarma en España, por el que se limitaba la libre circulación de personas para evitar la propagación del coronavirus SARS-CoV-2, que causa la enfermedad COVID-19, en España.

En virtud del Real Decreto que lo instaura, al menos durante 15 días, tan solo se podrá salir a la calle por causa de fuerza mayor y para efectuar un número limitado de actividades, entre las que está ir al trabajo, aunque las autoridades instan a las empresas a favorecer el teletrabajo.

Algunas empresas del sector veterinario ya han comenzado a funcionar con estas nuevas normas y se adaptan para seguir ofreciendo sus servicios, evitando la actividad presencial de sus trabajadores salvo que sea estrictamente necesario.

Un ejemplo es el Grupo Emer Veterinaria, dedicado a la distribución de equipamiento para clínicas veterinarias, que se ha comprometido a seguir dando un servicio “con total normalidad” a sus clientes, pero tomando las medidas impuestas por el Gobierno.

Así, en la compañía han establecido que el 80% de la plantilla trabaje desde casa, y además han adaptado su forma de trabajar para que en sus instalaciones y envíos de equipamiento se apliquen las precauciones impuestas.

“Nuestra manera de comprometernos con la actual situación, es seguir trabajando con la mayor normalidad posible, facilitar crédito a nuestros clientes y mantener unas ofertas especiales según las necesidades de cada cliente”, señala la compañía, que cuenta entre sus productos, con los últimos modelos de equipos de endoscopia adaptados a veterinaria.

Por último, desde el Grupo Emer Veterinaria han querido agradecer “a todos los sanitarios veterinarios la labor que están desarrollando y la fortaleza que demuestran en tan delicada situación”.