Covid-19: La industria veterinaria de España contribuirá a producir vacunas para el mundo

Este martes 21 de julio la directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), María Jesús Lamas, ha comparecido en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados para informar sobre la labor realizada por la agencia durante la crisis sanitaria causada por el coronavirus Covid-19.

En su intervención, Lamas ha desgranado las principales acciones de la Aemps durante los últimos meses, entre las que ha destacado su trabajo y participación en el desarrollo y la producción de una vacuna contra este virus, lo que ha considerado “el reto definitivo” en el que participa la agencia.

Sobre este asunto, ha señalado que para que la vacuna esté disponible a gran escala no basta con investigación, sino que hay que escalar la producción “a un nivel nunca visto”. Actualmente, todos los países están trabajando para mejorar su producción, y en el caso de España se está haciendo en colaboración con la industria veterinaria, a la que se está reforzando para adaptarla a la producción de vacunas humanas.

“Nuestro país es una potencia en fabricación de vacunas veterinarias que utilizan plataformas similares a las vacunas de uso humano. Hemos explorado su capacidad de producción para movilizar y ayudar a ampliar la capacidad mundial de producción y confiamos en que puedan realizar una contribución significativa”, ha defendido.

Así, será la industria veterinaria la que participe en la producción del antígeno de las vacunas de Covid-19 en España, dejando a la industria humana otras tareas para las que sí que está preparada, como el llenado.

De hecho, ha recordado que una planta española de envasado formará parte de la producción de una vacuna de Covid-19. Se trata de la vacuna de la compañía americana Moderna. En este sentido, Lamas ha señalado que están en contacto con otras fábricas para que en el futuro también se sumen a este proceso.

Sobre este punto, Lamas ha asegurado que “no basta” con poder fabricar el antígeno, sino que el envasado es “una parte crítica” de la fabricación de la vacuna, que también podría ser limitante para su disponibilidad. “Este objetivo debe traducirse en lograr un acceso equitativo a la vacuna justo y solidario con otras regiones menos favorecidas”, ha defendido.

EL TIEMPO PARA DESARROLLAR UNA VACUNA SE HA REDUCIDO A MENOS DE 2 AÑOS

“La Aemps ha movilizado recursos desde el inicio de la crisis para atender al desarrollo de estas vacunas, y desde hace años se trabaja en distintas plataformas en la idea de que algún día servirían para hacer frente a una crisis pandémica como esta”, ha asegurado Lamas.

Asimismo, ha indicado que la comunidad científica, la industria, y la Aemps, como reguladores, han diseñado las vías para que sea posible “poner a disposición de la sociedad no ya una, sino varias vacunas y efectivas en un tiempo récord”.

Y es que Lamas ha señalado que el tiempo medio para desarrollar una vacuna es de casi 10 años, pero estiman que una vacuna efectiva y eficaz para la Covid-19 podría estar lista antes de 2 años.

“La agencia mantiene un contacto continuo con las compañías que fabrican vacunas para conocer el estado de sus avances y participar de su investigación clínica. A día de hoy hay datos para poder decir de que dispondremos de una vacuna eficaz y segura”, ha insistido.

De hecho, ha apuntado que alguna de las vacunas más prometedoras ha sido ya presentada a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) para su evaluación, pues todo lo relativo a la vacuna se gestionará a nivel europeo, formando parte España de los comités que evalúen los productos que se vayan presentando.

ESTRATEGIA 'ONE HEALTH' EN LA GESTIÓN DE LA PANDEMIA

Por otro lado, Lamas ha considerado “que el sector de los medicamentos veterinarios también es estratégico para mantener el estatus sanitario de las explotaciones ganaderas y evitar la transmisión de enfermedades a las personas”.

Por ello, la Aemps instó a garantizar la continuidad en las actividades de fabricación, distribución y suministro de estos medicamentos, "incidiendo una vez más en la estrategia ‘One Health’ para enfrentarse a un virus cuyo origen es zoonótico".

En este sentido, explico qué contactaron con la industria farmacéutica veterinaria y pidieron la inmovilización y disponibilidad de medicamentos veterinarios tras considerar que podrían ser usados en salud humana si fuera necesario, cosa que finalmente no tuvieron que hacer.