La hiperplasia benigna de próstata podría afectar a un millón de perros en España

El 15 de septiembre se celebra el Día Europeo de la Salud Prostática. Coincidiendo con este día, Virbac ha presentado su nueva campaña de concienciación sobre la hiperplasia benigna de próstata (HBP) en perros con el lema: ‘Fácil de controlar, peligrosa de ignorar’.

Virbac, como empresa líder en el mercado de la reproducción de pequeños animales, con el 45% de la cuota de mercado (ventas en clínicas veterinarias de enero a julio 2022) es la única compañía farmacéutica que ofrece soluciones para el diagnóstico y el tratamiento precoz de la HBP.

Siendo referente en este ámbito, la compañía ha decidido crear esta campaña para abordar algunos de los problemas en el diagnóstico y tratamiento de la HBP. Para resumir la información han diseñado un folleto para veterinarios y un ‘take one’ para propietarios y darán algunas claves a través de las redes sociales.

La razón es que la compañía considera que esta es una enfermedad infradiagnosticada e infravalorada en perros. De hecho, a partir de los 5 años, hasta el 80% de los perros machos enteros presentan hiperplasia prostática, y este porcentaje aumenta progresivamente con la edad y llega al 95% en los perros de 9 años. La prevalencia estimada en España se calcula en torno a un millón de perros.

Sin embargo, Virbac lamenta que los problemas de próstata no son una prioridad para los veterinarios y estos no informan a los propietarios sobre la enfermedad, salvo en casos graves. “Con más de 200 pacientes potenciales, las clínicas solo detectan entre 2 y 5 casos al mes”, apuntan.

Asimismo, indican que tampoco existen estrategias de prevención ni exámenes de rutina para detectar la HBP, por lo que la mayoría de los diagnósticos se basan en la clínica descrita por el propietario.

“Una próstata agrandada es muy molesta, ya que presiona los órganos que la rodean causando diversos síntomas. También puede dar lugar a la aparición de problemas asociados (quistes, infecciones, abscesos…)”, recuerdan.

Como el veterinario, según destacan desde Virbac, casi nunca diagnostica la enfermedad en sus primeras etapas, sino en etapas avanzadas, esto puede terminar teniendo graves consecuencias clínicas. Los síntomas de la HBP, enumeran, son dificultad al defecar (varios esfuerzos sin éxito), estreñimiento (más de 48 horas sin defecar) o emisión de heces planas; dificultad al orinar y/o presencia de sangre en la orina; pérdida de sangre no relacionada con la micción (examina el lugar donde duerme); y molestias al caminar en las patas traseras (cojera).

TRATAR LA HIPERPLASIA BENIGNA DE PRÓSTATA EN PERROS ANTES DE QUE APAREZCAN LOS PRIMEROS SÍNTOMAS

Por todo ello, los especialistas recomiendan el tratamiento precoz de la HBP, incluso antes de que aparezcan los primeros síntomas. Y es que, muchos animales afectados presentan lesiones histológicas antes de mostrar síntomas. “Una HBP asintomática puede evolucionar rápidamente con consecuencias clínicas y predisponer al animal a enfermedades más graves”, apuntan.

Algunas complicaciones y riesgos de la HBP son los quistes prostáticos (14% de la población canina), la prostatitis aguda o crónica, los abscesos prostáticos o la peritonitis aguda secundaria por la ruptura de un absceso.

Teniendo esto en cuenta, Virbac apuesta por educar a los propietarios para que tomen consciencia de que sus perros machos sin castrar también pueden tener problemas de próstata y ayudar a las clínicas veterinarias a ampliar su oferta de servicios y promover el diagnóstico y tratamiento precoz de la HBP.

En este sentido, defienden que las clínicas que incluyen como parte de sus servicios el diagnóstico y el tratamiento precoz de esta enfermedad generan ingresos adicionales y mejoran la satisfacción de sus clientes

“El veterinario es parte de la solución en la labor de divulgación y la concienciación e implicación de los propietarios en su detección temprana y en la instauración y continuidad del tratamiento”, añade Virbac.

REVISIONES PROSTÁTICAS ANUALES PARA PREVENIR LA HIPERPLASIA BENIGNA DE PRÓSTATA EN PERROS

La intención es también que los propietarios tengan en cuenta que hay que realizar una revisión prostática anual en perros machos enteros a partir de los 5 años, algo clave para prevenir complicaciones y recomendado por los especialistas.

Esta revisión incluye pruebas como palpación rectal, ecografías o citología del líquido prostático, pero también está disponible el test Speed^TM CPSE, que mide la esterasa específica de la próstata canina circulante, un biomarcador válido y específico para trastornos prostáticos.

Además, la campaña de Virbac también trata de visibilizar que existen métodos no invasivos para un tratamiento eficaz de la hiperplasia benigna de próstata además de la orquiectomía tradicional.

Un ejemplo es Ypozane^® (acetato de osaterona), un tratamiento sencillo, eficaz, seguro y no invasivo de la HBP, incluso antes de que aparezcan los síntomas. Este tratamiento está indicado en machos reproductores, pues preserva la capacidad reproductora.

Ypozane reduce rápidamente los signos clínicos de la HBP y cuenta con una excelente tolerancia en perros de edad avanzada. Además de todo esto es de fácil cumplimiento, pues consiste en un comprimido al día durante 7 días. Una semana de tratamiento proporciona 6 meses de eficacia.

Por otro lado, está la opción de Suprelorin^® (acetato de deslorelina), la opción de esterilización médica reversible de Virbac, que bloquea la producción de hormonas sexuales de forma reversible durante 6 meses.