Grupo Emer firma un acuerdo con Johnson and Johnson para llevar el bisturí armónico a la veterinaria

En los últimos tiempos se ha popularizado el uso de equipos de sellado vascular en la cirugía veterinaria. Estos se están haciendo cada vez más imprescindibles para la coagulación y corte de vasos, ya que aumentan exponencialmente la seguridad de la cirugía disminuyendo el tiempo de intervención.

La mayoría de los modelos de sellado que se han estado comercializando hasta el momento estaban basados en la utilización de energía bipolar avanzada, que transforma la energía eléctrica en calor. Estos equipos son similares a los electrobisturíes bipolares convencionales pero con mucha mayor potencia y seguridad.

Sin embargo, en medicina humana, siempre en vanguardia, estos selladores bipolares han dado paso a los selladores o bisturíes ultrasónicos, utilizándose hasta en un 70% de las cirugías frente a los bipolares, debido a sus ventajas.

Ahora, en su afán por ayudar a la medicina veterinaria con la aportación de los mejores y más avanzados equipos, Grupo Emer Veterinaria ha firmado un acuerdo exclusivo con la multinacional Johnson and Johnson para comercializar en el sector veterinario el ETHICON GEN 11, único equipo del mercado que combina sellador bipolar avanzado y bisturí ultrasónico.

Imagen del ETHICON GEN 11 GENERATOR

El bisturí ultrasónico —también llamado armónico— es un dispositivo diseñado para efectuar incisiones y hemostasia simultáneamente. Su desarrollo se fundamenta en el empleo de ondas ultrasónicas de alta densidad que se transforman en energía mecánica para el corte y la coagulación del tejido. Se usa en los tejidos blandos, con el fin de controlar la hemorragia y reducir al mínimo la lesión térmica.

Además, el bisturí armónico realiza la hemostasia a través de la vibración de un cristal piezoeléctrico que crea una energía, la cual es transmitida a los tejidos y rompe los puentes de hidrógeno que unen las proteínas tisulares, y forma un coágulo que ocluye los vasos.

A diferencia del electrocoagulador y el bisturí de láser, que alcanzan temperaturas de 150 a 400 ºC, las cuales producen mayor daño estructural, el bisturí ultrasónico logra temperaturas máximas de 100 °C, con lo que se consiguen incisiones nítidas y coagulación con un mínimo daño tisular.

Entre las ventajas del bisturí ultrasónico se encuentran su precisión, la producción de un mínimo daño a los tejidos adyacentes a la zona operatoria, no produce humo ni carbonización de los tejidos, y no utiliza electricidad en su mecanismo de acción.

Por otro lado, las heridas cicatrizan más rápidamente, el posoperatorio se reduce, y se elimina el riesgo de producir calcinaciones de tejidos que pasadas unas horas de la intervención pueden degenerar en lesiones graves.

Así, desde el Grupo Emer destacan que “el bisturí de ultrasonidos proporciona una capacidad de corte y hemostasia comparable a la del bisturí eléctrico, ocasionando un menor daño a los tejidos sobre los que se aplica”.

Por último, el Grupo informa que se podrá obtener más información sobre esta nueva tecnología en Iberzoo Propet LIVEConnect en el que estará presente.