Clevor, el emético para perros a base de ropinirol de Ecuphar, ofrece una sencilla administración ocular no invasiva y cuenta con un rápido inicio de acción y corta duración de los vómitos
Ecuphar presenta Clevor, el primer colirio emético para perros
Clevor, el emético para perros a base de ropinirol de Ecuphar, ofrece una sencilla administración ocular no invasiva y cuenta con un rápido inicio de acción y corta duración de los vómitos
Francisco Ramón López - 16-04-2024 - 13:37 H - min.
La compañía Ecuphar (Grupo Animalcare) ha presentado Clevor, un emético para perros con ropinirol como principio activo con un novedoso formato de gotas de administración ocular que lo convierte en el primer colirio emético para perros.
Ingerir elementos dañinos es un comportamiento común de los perros. De hecho, según una encuesta, 9 de cada 10 perros ingerirán algo inesperado que puede comprometer su salud, como medicamentos, comida humana tóxica u objetos extraños, al menos una vez en la vida.
Desde Ecuphar han preparado un poster de tóxicos domésticos para perros y gatos que se puede solicitar al delegado de zona. En este, informan de algunos elementos dañinos, como el xilitol, los detergentes o los raticidas e instan a acudir al veterinario con urgencia.
Y es que en estos casos conseguir que el animal expulse el elemento ingerido es crucial. Aquí entran en juego principios activos como el ropinirol, un agonista dopaminérgico que induce la emesis muy fácilmente en perros estimulando receptores en la zona desencadenante de quimiorreceptores (CRTZ).
De esta manera, Clevor actúa en el centro emético del perro sin pasar por el tracto intestinal y cuenta con una selectividad superior para los receptores de dopamina de tipo D2 que la apomorfina, por lo que la redosificación con esta sustancia es más efectiva.
Además, como presenta una elevada selectividad por los receptores de dopamina, permite una reversión completa con un antagonista dopaminérgico (metroclopramida) en caso de que sea necesario.
Debido a su formato, Clevor ofrece una administración ocular no invasiva que consigue una absorción rápida y fiable, ya que cuenta con una cómoda presentación en gotero de un solo uso de 0,6 ml (aproximadamente 22 gotas) muy fácil de aplicar. En este sentido, el 96% de los tutores en un estudio clínico evaluaron su administración como fácil o muy fácil.
Se trata de un colirio preparado para su uso directo, sin necesidad de cálculo de dosis, medición o uso de desechables adicionales. Solo hay que aplicar de 1 a 8 gotas, según el peso del animal, repartidas a partes iguales entre ambos ojos. El tiempo estimado hasta el primer vómito es de 10 minutos.
Otra ventaja es que su efecto emético es de corta duración con un tiempo estimado entre el primer y último vómito de unos 16 minutos. De hecho, el 90% de los perros dejan de vomitar a los 45 minutos.
Además, Clevor se puede volver a administrar a los 15-20 minutos después de la primera dosis si el perro no vomita y es una medicación respetuosa con el paciente, ya que las gotas oftálmicas no originan temor ni dolor, a diferencia de lo que ocurre con las inyecciones.
La eficacia y seguridad de Clevor se evaluó en un estudio clínico de campo aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo con 100 perros. El 51% de los perros vomitó dentro de los primeros 10 minutos (número medio de vómitos de 4) y el 87% de los animales vomitó tras una dosis.