El impacto económico del coronavirus podría reducir los tratamientos preventivos frente a zoonosis poniendo en riesgo la salud humana y la animal
El bajón en tratamientos preventivos afecta a los veterinarios italianos
El impacto económico del coronavirus podría reducir los tratamientos preventivos frente a zoonosis poniendo en riesgo la salud humana y la animal
Redacción - 19-05-2020 - 17:13 H - min.
Las asociaciones veterinarias europeas siguen analizando cómo está afectando la crisis del coronavirus a la profesión. En esta ocasión, la Federación Nacional de Colegios Veterinarios Italianos (FNOVI) ha adelantado algunas claves de una encuesta que presentará en las próximas semanas.
Esta encuesta fue llevada a cabo en 2.626 colegiados del país, y en este primer acercamiento solo han mostrado los resultados en cuanto a los grupos de edad, género, provincias de actividad y áreas y tipo de profesión.
La FNOVI señala que algunos de las preguntas eran de respuesta abierta, y señalan que ha sido en estas en las que han visto mejor cómo está afectando la crisis a sus veterinarios. “Las medidas del gobierno para contener la propagación del virus han sido objeto de opiniones contradictorias, malentendidos y, a menudo, intolerancia por parte de muchos”, señalan los veterinarios italianos, que aseguran que muchos profesionales del país, al igual que en España, creen que aplicando medidas veterinarias la pandemia se habría combatido mejor.
En cuanto a las preocupaciones profesionales, las resumen en dos: la reducción y “casi eliminación” de los tratamientos preventivos en los últimos meses y el retraso de otros tratamientos no urgentes debido a la inseguridad de salir a la calle y la incertidumbre económica.
"La reducción, casi la eliminación de las actividades de prevención en este momento reduce significativamente la que debería haber sido la estación más rentable del año”, señala FNOVI, compartiendo las palabras de un veterinario, que apunta que, en teoría, es cierto que la profilaxis, necesaria para prevenir enfermedades, algunas zoonósicas, puede recuperarse, pero hay que tener en cuenta que los propietarios también se enfrentan a un impacto económico.
Y es que algunos profesionales transmiten que “muchas personas ya se han acercado desesperadamente diciendo que sin trabajo no pueden permitirse llevar a cabo los tratamientos y la profilaxis de su mascota”.
En España, tras comprobarse que las medidas de confinamiento se alargarían más de los 15 días planteados inicialmente, instituciones como el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid (Colvema), recordaron la importancia de la vacunación y desparasitación para combatir enfermedades animales, pero también prevenir enfermedades humanas.
Además, en esta misma línea, la Organización Colegial Veterinaria (OCV) ha compartido esta semana un cartel trasmitiendo la importancia de la medicina preventiva veterinaria, aprovechan que la mayor parte de España ha entrado en la primera fase de desescalada y de vuelta a la normalidad.
Por otro lado, apuntan que muchos tratamientos que se consideran como no estrictamente necesarios, como las esterilizaciones, se han pospuesto, principalmente porque los clientes no se sentían seguros al abandonar su hogar o porque temían gastar dinero, dada la fuerte incertidumbre económica.
“La disponibilidad financiera reducida de los dueños de mascotas obviamente tendrá repercusiones negativas en los próximos meses”, admite FNOVI, que señala que también tendrá su efecto la necesidad, reconocida por la mayoría de los veterinarios que completaron el cuestionario, de cambiar drásticamente los métodos de gestión y los puestos de trabajo.
Por todo esto, señalan que “en los últimos meses ha sido una prioridad enfrentar la emergencia, pero ahora es el momento de reflexionar sobre cómo enfrentar el futuro inmediato y el de los próximos meses, con la conciencia de que las dificultades serán muchas”, manifiestan.
En Italia también han tenido problemas con el acceso a equipos de protección individual, que son necesarios para prestar su servicio con seguridad durante la crisis. Y es que tanto allí como en España, las actividades veterinarias han sido consideradas esenciales, y se han podido seguir prestando sus servicios.
Otra área que ya llama la atención de Fnovi es la teleconsulta, que consideran, “sin duda”, una oportunidad que ha permitido estar cerca de los pacientes y propietarios en esta fase de emergencia, pero que tendrá que definirse no solo para los aspectos de responsabilidad profesional sino también económica, para no penalizar a los profesionales.