Desde SEO Birdlife advierten que ya se han observado más de un centenar de casos de gripe aviar en aves silvestres de España y destacan la mortalidad de la enfermedad en la Albufera de Valencia
La peor pandemia de gripe aviar hasta la fecha se ceba con las aves marinas de España y todo el mundo
Desde SEO Birdlife advierten que ya se han observado más de un centenar de casos de gripe aviar en aves silvestres de España y destacan la mortalidad de la enfermedad en la Albufera de Valencia
Redacción - 16-08-2023 - 13:00 H - min.
El virus H5N1, de influenza aviar de alta patogenicidad, que ha provocado miles de muertes de aves marinas desde 2021 en el hemisferio norte, se ha expandido rápidamente hacia el sur, a regiones del mundo donde nunca antes se había detectado. Los últimos brotes están afectando principalmente a aves marinas, algo inusitado hasta el momento.
En España se han observado ya más de un centenar de casos de gripe aviar en aves silvestres, poniendo en riesgo poblaciones de especies sensibles como las de charrán patinegro y pagaza piconegra, que han evidenciado mortalidad por la enfermedad en el Parque Natural de la Albufera de Valencia.
Desde SEO BirdLife advierten que es necesario mejorar el estado de conservación de las aves marinas para aumentar su resiliencia ante eventos como este y anima a la población a participar en los programas de ciencia ciudadana como la aplicación móvil Inspección Costera de Aves Orilladas (ICAO), que puede aportar valiosa información sobre el impacto de esta enfermedad.
“No es la primera vez que se oye hablar de la gripe (o influenza) aviar en Europa. Este virus, que afectaba a aves de corral, comenzó a detectarse en especies silvestres a inicios de los 2000, y a expandirse a través de las rutas migratorias de las aves”, explica la asociación.
Desde entonces, apuntan, se han dado episodios esporádicos de mortalidad masiva de aves principalmente acuáticas en humedales de todo el continente y de manera más o menos estacional. Sin embargo, lamentan que en 2021 el virus subtipo H5N1 de influenza aviar de alta patogenicidad dio el salto a las aves marinas, causando una situación sin precedentes que continúa hasta el presente.
En el caso de España recuerdan que cuenta con un Programa Nacional de Vigilancia de la Influenza Aviar para la detección precoz de la enfermedad, que incluye la comunicación e investigación inmediata por parte de los Servicios Veterinarios Oficiales de cualquier signo de enfermedad o mortalidad de aves domésticas, así como muestreos regulares en ciertas explotaciones, dependiendo del riesgo.
Durante el actual brote, entre el 1 de julio de 2022 y el 7 de junio de 2023 se han detectado 7 focos en aves domésticas, 1 en aves cautivas y 117 casos en aves silvestres en las comunidades autónomas de Andalucía, Cataluña, Galicia, País Vasco, Aragón, Castilla y León, Castilla la Mancha, Cantabria, Extremadura, Madrid, La Rioja, Asturias, Murcia y Valencia.
Preocupan especialmente los focos de los parques naturales de la albufera de Valencia y el delta del Ebro, “ambos lugares de extrema importancia para las aves marinas y acuáticas”. En el primero se han retirado ya más de 1.000 cadáveres de charranes patinegros y pagazas piconegras, pero se desconoce cuántos se deben a la gripe.
En este sentido, señalan que el Departamento de Acción Climática de la Generalitat de Cataluña confirmó un brote de influenza aviar en el delta del Ebro. Concretamente, el laboratorio Nacional de Referencia de Algete (Madrid) confirmó el pasado mes de julio el resultado positivo de influenza aviar de alta patogenicidad H5N1 en tres ejemplares de charrán patinegro localizados a la península del Fangar al norte del delta del Ebro.
Ante esta situación se han reforzado la vigilancia y las medidas de bioseguridad en las explotaciones avícolas, especialmente aquellas destinadas a evitar el contacto con aves silvestres. El seguimiento de las colonias de aves marinas también se ha intensificado, con el fin de cuantificar la incidencia de la enfermedad.
No obstante, insisten en que “ante una pandemia de tales dimensiones es necesario extremar las precauciones y tomar medidas de gestión adecuadas para evitar el contagio a las especies más sensibles”.
A nivel mundial, indican que en el verano de 2021, “mientras los seres humanos se libraban poco a poco de la peor pandemia del último siglo, las aves marinas empezaban a enfrentar la suya propia”. “La muerte de varios págalos grandes en las colonias escocesas por el virus H5N1 de influenza aviar de alta patogenicidad dio la voz de alarma”, recuerdan.
En invierno de ese mismo año —tal y como explica el reciente informe de la CMS-FAO del pasado mes de julio—, se produjeron mortalidades masivas de barnaclas cariblancas en sus zonas de invernada en Reino Unido y el virus se detectaba en Norteamérica donde comenzó a expandirse rápidamente por todo el continente.
A principios de 2022 también se dieron mortalidades masivas de aves en varios puntos de África, como en el Parque Nacional de las Aves del Djoudj (Senegal), una de las reservas ornitológicas más importantes del mundo.
En la primavera de 2022 el virus impactó de manera catastrófica en las colonias europeas de pelícano ceñudo, alcatraces y charranes (las de charrán patinegro, las más afectadas), calculándose que menos de la mitad de los reproductores volvieron a sus áreas de invernada después de la cría.
A finales de 2022 y principios de 2023 el virus había alcanzado por primera vez en la historia el sur del continente americano afectando a un gran número de especies, incluyendo mamíferos marinos. En tan solo cuatro meses de 2022, en las costas de Perú se contabilizaron 22.000 aves muertas, sobre todo pelícanos peruanos, y a inicios de 2023 se produjeron varamientos de varios miles de leones marinos.
“Lo que queda de 2023 no apunta a mejoras. Las colonias de aves marinas siguen siendo devastadas por la gripe. En Europa, si bien parece haber afectado con menor virulencia a los alcatraces, las colonias de gaviota cabecinegra, y más recientemente de gaviota tridáctila y araos, están siendo las más sensibles al virus y preocupa su rápida expansión y adaptación a nuevos huéspedes”, lamentan.
A nivel europeo, hasta hoy el virus de la gripe aviar se ha detectado en unas 400 especies de aves diferentes, pero los brotes que se están viviendo en estos dos últimos años están afectando principalmente a aves marinas, algo inusitado hasta el momento.
Y es que explican que “el comportamiento colonial durante el periodo reproductivo de especies como alcatraces y charranes crea el escenario perfecto para que el virus se propague con rapidez”.
“Los adultos toman tierra apenas una vez al año durante unos pocos meses para hacer sus nidos, muchas veces hacinados en remotos islotes o ensenadas. Esto quiere decir que estas colonias albergan gran parte de la población mundial de algunas de dichas especies por lo que el impacto sobre su población a nivel global es devastador”, advierten.
Para la asociación, los “números están posiblemente muy subestimados, por la dificultad de recuperar las carcasas de animales muertos y porque no en todas las colonias se cuentan con estimas poblacionales a largo plazo que permitan comparaciones interanuales”.
“Se prevé, además, que estas poblaciones tardarán varias décadas en recuperarse, si es que lo consiguen”, apunta Lucía Soliño, técnica del Programa Marino de SEO BirdLife. “Las aves marinas son animales longevos, que tienen periodos largos de maduración y un bajo número de pollos. Esto hace que la supervivencia adulta sea decisiva para la supervivencia de la especie. El hecho de haber afectado principalmente a individuos reproductores supone un duro golpe en dichas poblaciones, que va más allá de la mortalidad directa y que no parece que vaya a disminuir en los próximos meses”, añade.
Desde SEO Birdlife Todavía existen pocos datos sobre la posible inmunidad de las aves ante esta enfermedad. “En alcatraces, el oscurecimiento del iris que se ha observado en varios individuos aparentemente sanos podría estar relacionado con haber superado la enfermedad, aunque todavía no está claro cómo afecta a la visión esta alteración de los ojos y a sus probabilidades de supervivencia a largo plazo”, indican.
Para contribuir a la conservación de estas aves, la asociación da algunos consejos si algún ciudadano se encuentra un cadáver. El primer consejo es evitar tocarlo. “Aunque hasta ahora existen pocos casos de contagio a humanos y son de baja gravedad, para evitar el riesgo de zoonosis la manipulación y eliminación de las aves debe ser realizado por personal especializado con equipos de protección individual”, explican.
Además, también recomiendan que si se pasea con un perro hay que mantenerlo atado y a la vista para evitar que ingiera partes del animal muerto o que provoque molestias a animales enfermos.
Tras encontrar al animal se debe llamar al 112 o al Centro de Recuperación de Fauna (CRF) provincial correspondiente y seguir las instrucciones. "Los agentes ambientales se desplazarán a la localización señalada para recoger el animal o su cadáver", explican.
Por último, instan a enviar los datos de la observación a través de la app ICAO disponible para Android e IOS, para contribuir con SEO BirdLife a mejorar el conocimiento de las causas de mortalidad en aves marinas.