La futura reina de Dinamarca quería ser veterinaria

En su discurso de año nuevo, la reina Margarita II de Dinamarca anunció que el 14 de enero abdicará y dejará el trono a su hijo, el príncipe heredero Federico, de 55 años de edad. De esta manera, tras un acto de coronación ese mismo día, pasará a ser Federico X de Dinamarca.

Tras el cambio de trono, la reina seguirá llevando el título de majestad. Por su parte, la pareja real, Federico y su esposa María llevarán el título de rey y reina de Dinamarca. Asimismo, su hijo Cristian será el príncipe heredero.

Esta será la primera vez en casi 900 años que se produzca una abdicación en Dinamarca y, por lo tanto, desde la Casa Real danesa lo han calificado como un “acontecimiento extraordinario e histórico”. De hecho, la última vez que un regente danés renunció voluntariamente al trono antes de su muerte fue en 1146, cuando el rey Erik III Lam abdicó, supuestamente para entrar en un monasterio.

Este evento está generando que todos los medios a nivel mundial estén analizando los perfiles de los futuros monarcas, incluyendo a la futura reina, de 51 años, de nombre de pila Mary Elizabeth Donaldson y de la que se han recordado las declaraciones a los medios poco después de que se conociera su compromiso en 2003 —la boda tuvo lugar en mayo de 2004—, en las que afirmaba no haber deseado nunca ser princesa: “Quería ser veterinaria”, señaló, aunque finalmente se licenció el Comercio y Derecho.

Durante sus años como princesa heredera ha mostrado su compromiso con la sostenibilidad, la biodiversidad y la conservación de la naturaleza, llegando a ser, entre otras cosas, presidenta de la fundación WWF en 2020.

Según su perfil oficial de la Casa Real de Dinamarca, la princesa heredera María nació en 1972 en Tasmania (Australia) y es la hija menor de John Dalgleish Donaldson, profesor de Matemáticas Aplicadas, nacido en Escocia el 5 de septiembre de 1941, y Henrietta Clark Donaldson, nacida el 12 de mayo de 1942.

La pareja se casó en Edimburgo el 31 de agosto de 1963 y emigró a Australia en noviembre del mismo año. En 1975 se les concedió la ciudadanía australiana. La madre de la princesa heredera trabajó como secretaria ejecutiva del rector de la Universidad de Tasmania y murió el 20 de noviembre de 1997.

Después de terminar sus estudios universitarios la princesa heredera se mudó a Melbourne para trabajar en una empresa de publicidad, durante su carrera viajó por Europa y América, ejerciendo responsabilidades y cargos principalmente en departamentos de ventas.