VIERNES, 19 de abril 2024

VIE, 19/4/2024

PROFESIONALES

Rechazo sindical a la figura del auxiliar de inspección veterinaria

La Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios denuncia que esta figura, cuya implantación se está regulando en Aragón, abre la puerta a que profesionales con menor formación que los veterinarios realicen tareas que resultan vitales para garantizar la salud pública veterinaria

Juan Carlos Alonso, presidente de la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios.
Juan Carlos Alonso, presidente de la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios.

Rechazo sindical a la figura del auxiliar de inspección veterinaria

La Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios denuncia que esta figura, cuya implantación se está regulando en Aragón, abre la puerta a que profesionales con menor formación que los veterinarios realicen tareas que resultan vitales para garantizar la salud pública veterinaria

Ángel Espínola - 28-06-2018 - 14:00 H - min.

Ante el inicio de los trámites para regular la figura del auxiliar oficial de la inspección veterinaria en Aragón, tal y como adelantó Animal’s Health, la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet), presidida por Juan Carlos Alonso, ha mostrado su “oposición frontal” a esta figura, alertando de que la regulación podría causar “un grave daño a la calidad de la salud pública además de abrir una vía de fraude laboral”.

Según indica la federación sindical en un comunicado, con esta figura se pretende amparar legalmente la sustitución parcial del inspector veterinario oficial en mataderos por un trabajador de la empresa privada habilitado para algunas de sus labores mediante una formación “muy inferior la requerida para este tipo de trabajo”.

La organización recuerda que la inspección oficial veterinaria en mataderos es un trabajo médico forense que requiere una alta cualificación y una gran experiencia y que la alta la exigencia de este trabajo y su importancia en la salud pública, es lo que ha llevado tanto a la propia federación como a otros organismos especializados y asociaciones científicas, a insistir en la necesidad de crear una Especialidad en Ciencias de la Salud para los veterinarios dedicados  a la protección de la salud pública en el ámbito de la seguridad alimentaria y las zoonosis, de tal manera que se asegure que estos puestos sean cubiertos por facultativos con unos conocimientos y experiencia superiores a los que posee la media de la profesión.   

“Este decreto, sin embargo y escandalosamente, pretende que trabajadores de la empresa privada con una cualificación que está a años luz del facultativo veterinario, asuman tareas forenses y anatomopatológicas vitales para la calidad de la salud pública comunitaria, y que éstos estén sometidos solamente a controles periódicos por parte de los servicios veterinarios oficiales”, indica la federación.

Comparándolo con la medicina humana, el sindicato recalca que “sería similar a que decidiéramos que, en lugar de atendernos en la consulta un médico especialista, lo hiciera el cuerpo de celadores con un cursillo acelerado y habiendo pasado un test, y que el médico viniera tan solo una vez a la semana para auditar y comprobar si los medicamentos y tratamientos que nos prescriben son los adecuados”.

ABRE LAS PUERTAS AL INTRUSISMO LABORAL

Además, añaden, este decreto también abriría las puertas a que las empresas privadas contraten otros profesionales que no tienen competencias legales en la inspección de alimentos de origen animal para hacer trabajos que corresponden al veterinario, con el consiguiente intrusismo laboral. “O que se contraten veterinarios en puestos de inferior categoría para que hagan un trabajo mucho más precario y menos especializado con una inferior remuneración”.

Fesvet identifica todo ello esto como un grave atentado contra la calidad de la salud pública y exige que se dé marcha atrás con este decreto. Para presionar en este sentido la federación ha iniciado una campaña informativa del riesgo que esto supondría para la salud pública, “además de la importante agresión que implicaría a las competencias profesionales del veterinario”.

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