Preocupación entre los veterinarios por los “numerosos conflictos” de Presvet y la elevada carga burocrática

El Colegio de Veterinarios de Valencia ha lanzado un comunicado en el que destaca una reciente preocupación que afecta al colectivo profesional: la reciente implementación de la normativa que regula el uso de antibióticos en veterinaria a través del sistema Presvet.

“La reciente implementación del sistema Presvet, que regula el uso de antibóticos en veterinaria, ha generado un profundo malestar entre los profesionales del sector. Desde el Colegio de Veterinarios de Valencia queremos mostrar nuestro apoyo a todos los colegiados, conscientes de que esta normativa supone un retroceso para la profesión, dificultando la labor clínica y afectando tanto a los pacientes como a sus tutores. Estamos trabajando para trasladar estas preocupaciones a las autoridades competentes y buscar soluciones que protejan la salud y el bienestar animal”, manifiestan desde el Colegio.

Además, aseguran ser conscientes de que “la normativa supone una carga burocrática muy elevada” para la profesión, y señalan que “no compensa los beneficios que se puedan obtener en la reducción de consumo de antibióticos en animales de compañía, afectando tanto a los profesionales como a los pacientes y sus tutores”.

“Como veterinarios, siempre hemos sido los primeros interesados en garantizar un uso responsable de los medicamentos, especialmente los antibióticos, por su impacto en la salud pública y en la lucha contra la resistencia antimicrobiana. Sin embargo, la normativa actual no solo dificulta el cumplimiento de esta responsabilidad, sino que entorpece nuestro ejercicio clínico y pone en riesgo la calidad de la atención que ofrecemos”, lamentan.

Desde el Colegio, apuntan que, entre los numerosos conflictos que surgen con esta normativa, destaca una desproporcionada carga administrativa, que incrementa la burocracia en detrimento de nuestra labor clínica.

Asimismo, resaltan la imposibilidad de reflejar en la receta datos distintos al código de identificación, en caso de que el responsable del animal no lo tenga correctamente identificado; así como las desmesuradas sanciones por la falta de comunicación de los antimicrobianos, que recoge la normativa.

Por otro lado, lamentan “la falta de confianza en el criterio profesional veterinario para ejercer su trabajo y ser garante del uso racional de medicamentos”.

“Estamos trabajando activamente para transmitir estas preocupaciones a las autoridades competentes, con el objetivo de encontrar soluciones que protejan tanto nuestra profesión como la salud y el bienestar de los animales y sus responsables legales”, aseguran desde el Colegio.