Dimite Delia Saleno, presidenta de CEVE, y el Comité Ejecutivo en bloque

La presidenta de la Confederación Empresarial Veterinaria Española (CEVE), Delia Saleno, y el Comité Ejecutivo de CEVE en bloque han anunciado mediante sendas cartas, a las que ha tenido acceso Animal’s Health, su dimisión a todos los efectos de sus cargos.

“Esta acción la llevo a cabo después de una larga meditación sobre las implicaciones que entiendo que puede ocasionar a la organización en este momento, pero los acontecimientos internos ocurridos desde mi reelección, y sobre todo en el último año me impiden desempeñar plenamente las funciones de presidenta”, manifiesta Saleno.

En la misma línea, desde el Comité Ejecutivo indican que, “tras todos los acontecimientos sucedidos el último año y a pesar de la moción de confianza aprobada por mayoría cualificada, no debemos continuar en nuestros cargos”.

En este sentido, hacen referencia a “un ambiente de enfrentamiento y bloqueo” que ha paralizado el cumplimiento del Plan estratégico aprobado por unanimidad por la Asamblea General en marzo de 2023.

“Se ha intentado llegar a un entendimiento por todos los medios, tanto directamente por varios miembros del comité como mediante la intervención de personas ajenas a este que se ofrecieron a interceder, sin obtener ningún resultado que no fuera una persistente actitud negativa y el incumplimiento de acuerdos previamente consensuados”, lamentan.

Asimismo, señalan una “ausencia de voluntad de una minoría a acatar las decisiones que, democráticamente, la mayoría había adoptado”. “La escasa disposición de casi todos los miembros de la Junta a apoyar activamente al Comité, a pesar de que la moción de confianza a favor de su gestión”, insisten.

“Esto hace que nuestra tarea sea una labor titánica que conlleva un agotamiento físico y mental que la mayoría ya no podemos resistir. Y finalmente, la lealtad a nuestros cargos electos, especialmente al cargo de presidenta, nos impide seguir formando parte del Comité”, añaden.

Hasta la fecha, afirman que el comité ha intentado conducir esta crisis por la vía del dialogo de forma que no trascendiera fuera de la organización, sin dar a conocer la mayoría de las acciones que se han tomado para entorpecer, o directamente bloquear, el trabajo que se llevaba a cabo.

“Desde el Comité Ejecutivo hemos preferido tener paz a tener razón. Muchos de nosotros hemos dedicado años de nuestra vida a este proyecto. Con mucha ilusión, que ahora se ha perdido por las acciones de unos pocos y la inacción de unos muchos”, explican.

Como conclusión, defienden que no se arrepienten “de las horas dedicadas y los kilómetros recorridos, pero actualmente no estamos dispuestos a seguir debido a la situación de malestar, desconfianza y bloqueo”. “No nos quedan ánimos”, finalizan.

PRESIDENTA DE CEVE: ACUSADA DE COMETER DELITOS Y AGOTADA EMOCIONALMENTE

Por su parte, Saleno ha explicado en su carta que no ha podido trabajar como le habría gustado debido a la situación. “Este último año, en vez de dedicar el tiempo a actividades constructivas que consigan avances en la resolución de los graves problemas legislativos, sociales y económicos del sector veterinario, tal como la organización ha actuado en toda su existencia, he tenido que dedicar la mayoría del tiempo a esquivar ataques, engaños, manipulaciones de palabras mías o del equipo del comité ejecutivo sacadas de contexto”, denuncia.

La presidenta saliente ha afirmado que la situación ha sido de “saboteo constante”, reteniendo documentación por parte de miembros de la Junta de Gobierno, haciendo amago de abandonar la organización o incluso “intentando estrangular su tesorería”. Además, ha señalado que se han incumplido en varias ocasiones los criterios de confidencialidad de CEVE “provocando daños personales y a la organización”.

“El Comité Ejecutivo y, especialmente mi persona y la del secretario, han sufrido insistentemente acusaciones injustas como de ‘responder a intereses ocultos’, ‘maniobrar por intereses personales’, ‘cometer delitos’ o ‘acaparar poder’ (sin haberse concretado el qué). En realidad, lo que pasaba era una acumulación inmensurable de trabajo, asumir tareas de los que se comprometían y no cumplían o corregir textos realizados de manera negligente”, rememora Saleno.

Todo este ambiente que se respiraba en la patronal veterinaria ha provocado, según critica la ahora expresidenta, que todavía no se hayan podido completar las plazas vacantes para los órganos de tanta responsabilidad como las comisiones paritarias.

Por otro lado, Saleno asegura que se marcha “sintiendo una profunda tristeza” por no poder culminar el proyecto de su equipo, pero advierte que los ataques sufridos “durante demasiado tiempo” y los “muy pocos apoyos activos” de los que dispone le hacen imposible continuar. “Estoy completamente agotada a nivel emocional”, confiesa en su carta.

MENTIRAS Y MANIPULACIONES: GUERRA INTERNA EN LA PATRONAL VETERINARIA

En su carta, la expresidenta de la patronal veterinaria considera que a lo largo de su trayectoria al frente de la organización ha conocido personas comprometidas y movidas por la “gran ilusión de colocar al sector veterinario en un lugar estratégico e importante que se merece”.

No obstante, declara que en el último año ha conocido “la peor faceta de la condición humana”. Y es que, Saleno apunta a “un grupo muy reducido” al que acusa de “perpetuar mentiras, manipulaciones y crear un ambiente irrespirable”, siendo capaz de “bloquear la actividad de toda una confederación sin ofrecer a cambio ninguna propuesta constructiva alternativa”.

“Hay un dicho que afirma que, si alguien no te puede controlar, intentará controlar como otros te ven”, remarca Saleno en su carta de dimisión, asegurando que no desea seguir dos años más como presidenta “para continuar viendo como algunos trabajan activamente para crear desunión, para manipular miembros de las juntas territoriales y volcarlos en contra de la presidenta y de las decisiones del comité ejecutivo”.

Además, enfatiza en su carta que alguna territorial se anuncia en las redes sociales como “antigua CEVE”, algo que afirma no entender. “¿Da tanta vergüenza la marca CEVE?”, se pregunta la expresidenta de la patronal.

“A la vez, estoy desilusionada porque algunos vocales pertenecientes a la Junta Directiva se han creído las mentiras transmitidas por Jesús A. Gutiérrez en las múltiples llamadas efectuadas sin ni siquiera molestarse a contrastar si esto era verdad antes de firmar un escrito que todavía me cuesta entender cuál era su fin”, subraya Saleno.

La expresidenta concluye su carta deseando que al próximo presidente de la patronal y al equipo que le acompañe se les “manifieste respeto y se les dejen trabajar para el bien de todos”.

“Estamos en un momento histórico de transformación social, económica y jurídica y por lo tanto nos quedan muy pocos años de ventana de oportunidad para poder mejorar nuestra posición estratégica en la economía y en el sistema sanitario, como también mejorar nuestra seguridad jurídica. Y esto solo ocurre una o dos veces en un siglo”, recalca.

A este respecto, destaca que si no se aprovecha ahora se sufrirá “por seguir siendo insignificantes y no poder avanzar y desarrollarnos como sector". "La anterior ventana fue en los años 80, los años de la transición, y todavía estamos sufriendo las desastrosas consecuencias de la ausencia de la voz del sector veterinario en aquella época”, recuerda.

“En el año del décimo aniversario de CEVE deseo que el proyecto continue y consiga el fin por el que nació. De lo contrario, se vislumbran los peores vaticinios y seguiremos siendo el más penoso sector con preparación universitaria”, concluye Saleno, agradeciendo el trabajo a todos aquellos que han colaborado con la patronal estos últimos tiempos.